El tiroteo en una discoteca de Orlando, la más letal de su tipo en Estados Unidos, ha reabierto el debate sobre el control de armas en ese país.
El asesino de Orlando, responsable de la muerte de 50 personas en una discoteca LGBT, cometió el crimen con un AR-15. Este fusil de asalto semiautomático usado por el Ejército de Estados Unidos se puede obtener fácilmente por internet y ha sido el arma usada en otros tiroteos de este tipo en el suelo norteamericano.
El origen del arma. Este fusil ligero fue desarrollado en el año 1957 por la compañía ArmaLite, responsable de otras armas como el M4. Fue concebido como una versión más ligera del AR-10. Fabricada masivamente por la compañía Colt, en 1959 comenzó a ser usado por las el Ejército y Cuerpo de Marines de EE.UU. bajo el nombre de M16. Sin embargo, para su circulación en agencias gubernamentales y para el público civil, siguió siendo usado denominado AR-15.
Historia sangrienta. Popular desde su fabricación, se trata del fusil semiautomático de mayor consumo entre el público civil, bajo la legislación estadounidense. Su accesibilidad al público es tal que se puede comprar a través de armerías e internet desde 500 dólares, con las únicas condiciones de ser mayor de edad, no tener antecedentes penales y un documento que certifique que el comprador no tiene enfermedades mentales. Quizás por esto, ha sido usado en masacres como las de Colorado, Newton y San Bernardino en Estados Unidos, y la de un campamento juvenil en Noruega. Según el FBI, Omar Mateen compró el arma dos días antes de cometer el crimen.
Características letales. El arma tiene un peso ligero de 4,50 kg, un calibre de 5.56 m, un alcance de 550 m., una velocidad máxima de 975 m/s y una cadencia de 30 disparos por minuto. Tiene una fuerza de retroceso considerable, por lo que no es un arma fácil de usar sin entrenamiento previo. El fusil posee además pistolete, guardamano y culata de alta durabilidad, un punto de mira y se le pueden adjuntar dispositivos ópticos. Entre 1994 y 2004, el arma estuvo prohibida en los Estados Unidos, pero el lobby de la Asociación Nacional del Rifle logró que la restricción de levantar.
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