¿“Campos de concentración” en EE.UU.? La denuncia de una popular congresista desata una polémica

La congresista Alexandria Ocasio Cortez denunció este semana que los recintos en los que el Gobierno de Estados Unidos interna a los inmigrantes son "campos de concentración", desatando críticas de republicanos que afirman que esto menoscaba a los judíos que murieron en el Holocausto. "Estados Unidos tiene campos de concentración en nuestra frontera sur y eso es exactamente lo que son", dijo este lunes la parlamentaria, popular entre los demócratas y polémica entre los partidarios del Gobierno de Donald Trump, después de que varios medios citaran a expertos que afirman que los centros de detención para migrantes tienen esa estructura.

Ocasio Cortez señaló en un video en vivo de Instagram que "el hecho de que los campos de concentración sean una práctica institucionalizada en el 'hogar de los libres' es muy perturbador", y agregó que es necesario hacer algo al respecto.  Asimismo, dijo que "un gobierno que crea campos de concentración es fascista" y advirtió que no está utilizando estos términos a la ligera. Las declaraciones de la congresista fueron compartidas por la prensa y los opositores de Donald Trump en redes sociales, pero generó rechazo entre sus partidarios y entre autoridades fronterizas.

La polémica en EE.UU.

El uso de la expresión "campos de concentración”, referencia a los lugares generó, por ejemplo, la reacción de la congresista republicana Liz Cheney. La hija del exvicepresidente de George W. Bush, Dick Cheney, aseveró que las declaraciones de Ocasio-Cortez eran una deshonra para la memoria de las víctimas del Holocausto y para la propia representante demócrata.  "Por favor @AOC háganos un favor y pase unos pocos minutos leyendo sobre la historia. Seis millones de judíos fueron exterminados en el Holocausto", señaló.

"Es absurdo que llamen 'campos de concentración' al trabajo arduo que hacen nuestros agentes en la frontera, yo acabo de visitar uno de estos centros y los niños estaban jugando, viendo películas, haciendo rompecabezas", dijo al respecto el vicepresidente del Sindicato de la Patrulla Fronteriza de EE.UU., Art Del Cueto. Aseguró que los agentes trabajan al máximo para atender el alto flujo de migrantes que cruzan la frontera y están pendientes cuando uno de los detenidos, sea un adulto o un menor, requiere de atención médica.

Del lado demócrata, el senador izquierdista y precandidato presidencial Bernie Sanders, de ascendencia judía, se refirió este miércoles a la polémica y señaló a la cadena CNN que nunca ha utilizado este término, pero resaltó que "los niños están siendo traumatizados y eso es inaceptable". "Lo que puedo decir es que estamos encerrando a niños en condiciones deplorables y estamos manteniendo a niños por semanas en lugares que no están diseñados para niños", dijo Sanders, para cuya campaña presidencial del 2016 trabajó Ocasio Cortez.

A través de su cuenta de Twitter, Ocasio Cortez se reafirmó en su comentario y dijo que “mis héroes son los que se pronunciaron cuando no era fácil. Los niños están muriendo en jaulas en nuestra frontera. Familias son puestas en ‘congeladoras’ y ‘jaulas de perro’. En el futuro, la gente buscará qué periodistas, autoridades y ciudadanos se pronunciaron por lo correcto en este momento”. “Los llamamos campos de concentración porque entran en la definición de estos y en el concepto académico. (…) Digan lo que quieran, los niños están muriendo y no estoy aquí para hacer que la gente se sienta cómoda con eso”, agregó.

Retenidos en la frontera

Las detenciones de migrantes en la frontera de Estados Unidos con México alcanzaron las 144,000 personas en mayo, tocando un máximo en 13 años. Se trata en su mayoría, aunque no solamente, de centroamericanos que huyen de la violencia y la pobreza. El presidente Donald Trump ha hecho de la lucha contra la inmigración irregular una pieza angular de su gobierno, y se ha embarcado en una agria pugna con el Congreso en su búsqueda de fondos para construir un muro en la frontera con México con el fin de frenar la llegada de personas.

A principios de 2017, Donald Trump anunció un endurecimiento de la política migratoria y en 2018 lanzó su política de "tolerancia cero", que propició a que más de 2.300 niños fueran separados de sus padres migrantes. El mandatario amenazó hace poco a México con imponer aranceles progresivos si no lograba frenar el flujo de migrantes. Tras unas tensas negociaciones, el gobierno mexicano logró una tregua de 45 días en la que se comprometió a desplegar 6.000 elementos de la Guardia Nacional en su frontera sur. (Con información de EFE y AFP)