Busco hacer "una declaración de guerra total contra la raza negra". James Jackson, un exsoldado que luchó para Estados Unidos en la guerra en Afganistán, se declaró culpable de “terrorismo”.
Un exsoldado de Estados Unidos blanco que viajó a Nueva York expresamente para matar a personas negras se declaró culpable de "terrorismo", tal como por primera vez reclamó la Fiscalía de ese estado en un crimen racial por el asesinato de un anciano negro de 66 años en 2017.
Según informa la Fiscalía de Nueva York, James Jackson, de 30 años, se declaró culpable de todos los cargos contra él, entre los que la Fiscalía citó "asesinato en primer grado para promover un acto de terrorismo, asesinato en segundo grado como un crimen de terrorismo y asesinato en segundo grado como crimen de odio".
La sentencia definitiva está prevista para el próximo 13 de febrero, según la Fiscalía, que prevé que el acusado sea condenado a cadena perpetua, la máxima pena en el estado de Nueva York. La Fiscalía también recordó que se trata del primer caso en el estado de Nueva York en el que un asesinato por odio racial es considerado un acto de terrorismo, pues ha habido otros casos en este sentido, como el del neonazi en Charlottesville (Virginia), donde en 2014 arrolló con su coche a un grupo de manifestantes antirracistas.
Contra el nacionalismo blanco
"El nacionalismo blanco no se va a normalizar en Nueva York", aseguró el fiscal del distrito de Manhatta, Cyrus R. Vance, citado en el comunicado. "Si va a venir a Nueva York a matar neoyorquinos en nombre del nacionalismo blanco, serás investigado, juzgado e incapacitado como el terrorista que eres. Pasarás el resto de tu vida en la cárcel sin la posibilidad de libertad condicional porque no hay sitio en nuestra ciudad o en nuestra sociedad para terroristas", agregó de forma directa Vance.
Jackson, que regresó de Afganistán en 2011, admitió que el pasado 20 de marzo apuñaló en la espalda a Timothy Caughman, con una espada de 70 centímetros de estilo romano. Al día siguiente, acudió a una estación de policía en Times Square, en el centro de Manhattan, y se entregó, tras lo que confesó que viajó a la Gran Manzana para matar hombres de raza negra.
De acuerdo con la policía, Jackson escogió llevar a cabo su crimen en Nueva York por la atención mediática que tendrían sus acciones. Según el comunicado de la Fiscalía, con su asesinato el acusado pretendía hacer "una declaración de guerra total contra la raza negra" para "inspirar a los hombres blancos a matar a hombres negros y para atemorizar a los hombres negros y provocar una guerra de razas".
EFE
Comparte esta noticia