De acuerdo con la información preliminar, el blanco de los asesinos era un joven de 18 años, que al parecer tenía deudas con una banda de narcotraficantes.
Seis miembros de una misma familia, entre ellos dos mujeres y un adolescente de 17 años, fueron asesinados a tiros esta madrugada en una vivienda en Mangaratiba, un balneario en el litoral sur del estado brasileño de Río de Janeiro, informaron fuentes oficiales.
Los cuerpos fueron hallados por agentes de la Policía Militarizada de la vecina ciudad de Angra dos Reis que acudieron a una residencia en el barrio Parque Bela Vista, en Mangatatiba, tras ser alertados por vecinos que dijeron haber escuchado numerosos disparos.
Al llegar al lugar, ubicado sobre una carretera regional, los uniformados encontraron un cuerpo en las afueras de la residencia, al parecer tiroteado cuando intentaba huir por el tejado de la vivienda, y otros cinco dentro de la construcción.
Ajuste de cuentas
De acuerdo con las informaciones preliminares de los investigadores, los asesinos acudieron a la vivienda con la intención de asesinar a uno de sus ocupantes, que al parecer tenía deudas con una banda de narcotraficantes, y terminaron asesinando a todos los que encontraron.
De la matanza solo se salvaron un bebé de siete meses, que salió ileso, y un adolescente de 15 años, que no estaba en casa en el momento del ataque. De acuerdo con vecinos, el blanco de los pistoleros, identificado como Bruno Souza dos Santos, de 18 años y con varios antecedentes criminales, había salido recientemente de la cárcel.
Además de Dos Santos, fueron asesinados su esposa, Rayane Nunes da Silva, de 23 años, y su cuñada, Michele Nunes da Silva, junto con el marido de esta última y dos de sus hijos, de 17 y 18 años.
EFE
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