Han exigido a la comunidad internacional medidas para "detener el genocidio contra los sirios".
La Organización para la Cooperación Islámica (OCI) dijo hoy que el régimen sirio cometió "crímenes de guerra" en los barrios asediados del este de la ciudad de Alepo.
En una reunión de emergencia en su sede en la ciudad de Yeda (Arabia Saudita), el secretario general de la organización, Yusef al Ozaimin, responsabilizó a la comunidad internacional de lo que ocurre en Alepo y le exigió que "tome medidas para suspender el genocidio contra los sirios". Asimismo, pidió el envío de ayuda humanitaria y medicamentos a la zona, así como de observadores internacionales, y que los "criminales de guerra" sean juzgados.
Al Ozaimin dijo además que la evacuación de civiles y combatientes de los últimos barrios asediados del este de Alepo a zonas controladas por los rebeldes en el oeste de la provincia homónima "debe ser voluntaria" y no forzada. Esto en referencia a un reporte de la ONU que señala que entre 35 mil y 40 mil personas que fueron evacuadas del este de Alepo en los últimos días se dirigieron en su mayoría hacia áreas rurales de esta provincia y de la vecina Idlib que están controladas por los rebeldes. Muy pocos quisieron ir a la zona occidental de Alepo, que está dominada por las fuerzas gubernamentales.
La reunión de hoy de la OCI, a nivel de ministros de Exteriores del Consejo Ejecutivo, fue convocada por Kuwait para tratar la situación en Alepo. El ministro de Exteriores kuwaití, Sabah Jaled al Sabah, pidió al régimen sirio que permita el establecimiento de corredores "seguros para los civiles" y facilite la llegada de ayuda humanitaria a aquellos que la necesitan. Al Sabah agregó que la crisis siria es "la peor en la historia contemporánea" y "no se resolverá militarmente".
Comparte esta noticia