Según Rusia, uno de los pilotos murió en el aire, mientras que el otro fue tomado prisionero por fuerzas turcomanas en Siria, pueblo que lucha contra Bachar Al Assad y es apoyado por Turquía.
La situación se complica en la región del medio oriente donde se libran cruentas batallas entre el Estado Islámico, rebeldes sirios, fuerzas de Bachar Al Assad, y Rusia.
Tras conocerse que Turquía derribó un bombardero ruso Su-24 porque “aparentemente” invadió su espacio aéreo, el presidente ruso Vladimir Putin sostuvo que este episodio tendrá graves consecuencias en las relaciones entre ambos países.
Sin embargo, no está muy claro que fue lo que ocurrió con los dos pilotos que se encontraban en la nave.
Lo que sí resulta evidente gracias a un video que circula en las redes sociales, es que los dos pilotos se eyectaron de la nave en llamas y accionaron sus paracaídas. Las imágenes muestran que un grupo de rebeldes que luchan contra el gobierno de Bachar Al Assad (apoyado por Rusia) comenzaron a disparar contra los pilotos.
Según informó el general Serguéi Rudskói, portavoz del Estado Mayor del Ejército Ruso uno de los pilotos murió en el aire y el otro fue tomado prisionero por los rebeldes turcomanos en Siria.
Sin embargo, Turquía afirma que los dos pilotos se encuentran prisioneros y los servicios secretos de ese país negocia su liberación.
De ser así, es posible que sean liberados puesto que los turcomanos (etnia turcoparlante que se ubica en Siria) son apoyados por las fuerzas del gobierno turco.
Turquía acusa a Rusia de solo atacar a los rebeldes que enfrentan al regimen sirio, aunque lo cierto es que Rusia también bombardea al Estado Islámico.
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