El menor de 13 años recibió el órgano donado por un hombre de 41 años que falleció a causa de un traumatismo encéfalo craneal en un hospital de Chimbote. El donante también salvó a otras 4 personas.
Un adolescente de 13 años, que padecía de insuficiencia cardíaca avanzada, se convirtió en el paciente número 100 de trasplante de corazón realizado en el Instituto Nacional Cardiovascular (Incor) de EsSalud, cuyos especialistas hicieron posible que el menor ahora tenga una mejor expectativa y calidad de vida.
Sebastián, a los tres meses de nacido, le detectaron anomalía de Ebstein y una miocardiopatía, un defecto cardíaco que le producía fatiga y dificultad para respirar, lo que además le impedía que pueda realizar sus actividades con normalidad e incluso tuvo que dejar de estudiar.
La compleja operación se realizó el pasado 11 de agosto y fue factible gracias a que un hombre de 41 años, que falleció a causa de un traumatismo encéfalo craneal en un hospital de Chimbote, donó su corazón. El donante también salvó a otras 4 personas.
El doctor David Gálvez, presidente del Comité de Trasplante Cardíaco del Incor, informó que, en el caso del paciente adolescente, EsSalud tuvo que contratar un vuelo chárter para el traslado de órganos desde provincia a Lima, y desde el aeropuerto, utilizar un helicóptero para trasladar el corazón hacia el Instituto Nacional Cardiovascular.
Explicó que entre que se extrae el corazón al donante y el momento que es trasplantado no debería pasar más de cuatro horas, lo que obliga a EsSalud a trabajar sincronizadamente para que todo sea un éxito.
Resaltó que Incor es la única institución que realiza trasplantes de corazón en el país, para lo cual cuenta con profesionales multidisciplinarios de alta especialización y equipamiento de última generación.
“El menor ha evolucionado satisfactoriamente al trasplante de corazón y ha sido dado de alta. Él deberá seguir con sus controles, medicación y sus terapias de rehabilitación cardiaca”, apuntó el especialista.
Agradecimiento a la familia del donante
La señora Yanet Salvador Calle, madre de Sebastián, agradeció a Dios, a la familia del donante de corazón, así como a los médicos y enfermeras del Incor que hicieron posible que su hijo tenga una segunda oportunidad de vida.
“Mi hijo ha vuelto a nacer gracias a Dios, a los especialistas y al hombre que donó el corazón. Ahora Sebastián vuelve a casa a comer su plato favorito: tallarines verdes y pronto retomará sus estudios de segundo de secundaria en el colegio San Miguel de Piura”, expresó muy emocionada la madre de familia.
Escasez de donantes
El doctor David Gálvez sostuvo que el único limitante que tienen los especialistas para realizar trasplantes es la escasez de donantes. Precisó que en el país hay solo dos donantes por cada millón de habitantes, cuando en naciones como España la cifra llega a 40 donantes por cada millón de habitantes.
En ese sentido, hizo un llamado a la población a sumarse a este acto altruista que salva muchas vidas. Cada persona sana tiene en el futuro 3 a 5 veces más probabilidad de requerir un órgano para trasplante que convertirse en un donante, por eso un llamado a todos los peruanos a manifestar su voluntad de donar órganos.
“Un donante puede salvar la vida de hasta 9 personas cediendo su corazón, hígado, riñones, pulmones, páncreas, córneas, entre otros órganos y tejidos”.
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