´¿Se puede pensar que ella lo hizo todo sola? Imposible. Ha tenido la guía, le han lavado el cerebro para que lo haga, y ahora ha terminado expuesta al chantaje´, expresó.
Nuevos detalles surgen y hacen más difícil llegar al verdadero culpable del asesinato de la empresaria Myriam Fefer, ocurrido en agosto del 2006, más ahora que Eva Bracamonte y su ex pareja Liliana Castro Mannarelli fueron denunciadas por el Ministerio Público, acusación formal hecha por el fiscal de la 15º Fiscalía Penal, Fidel Castro.
Marco Bracamonte, ex esposo de la asesinada empresaria judía, dijo en declaraciones a la revista Caretas, que en caso de ser hallada su hija Eva como autora intelectual del crimen contra su madre, ella no habría actuado sola, sino que tuvo participación directa en esos hecho, Liliana Castro, la amiga íntima de su hija con quien comparte su residencia.
"¿Se puede pensar que ella (Eva) hizo todo sola? Imposible. Ha tenido la guía, probablemente le han lavado el cerebro para que lo haga, diciéndole mil cuentos, diciéndole mil cuentos y ahora ha terminado expuesta al chantaje, a la extorsión", expresó.
La extorsión que Liliana Castro Mannarelli estaría ejerciendo contra Eva Bracamonte, la fundamenta en conversaciones que sostuvo con David Hugo Rímac Hinostroza, trabajador de la Inmobiliaria Sideral, quien llegó a la empresa a inicios de los sesenta y maneja importante información contable.
Este personaje dio detalles a Marco Bracamonte sobre los "abultados gastos" de Liliana Castro, desde que asumió la gerencia general de la inmobiliaria en agosto del 2008. Asimismo, de la transferencia a su nombre del 50% de acciones de Sideral, y de los "costosos honorarios" que recibe el abogado Julio Rodríguez que defiende la pareja de jóvenes involucrados en este sonado caso.
"Me dijo que Eva estaba siendo presionada por esta chica Castro para transferirle el 50% de las acciones de la empresa. Cuando mi hija le dio la orden al señor Rímac para que proceda con la transferencia, fue después de una larga discusión a gritos destemplados entre ellas dos. Al parecer Eva no estaba muy de acuerdo con esa transferencia", indicó Marco Bracamonte.
Por el momento, no se sabe si la Fiscalía solicitará la declaración de David Hugo Rímac Hinostroza, aunque Marco Bracamonte adelantó, que el aludido "no quiere decir nada más" por temor a perder el trabajo y arriesgar su integridad física.
"Los errores se pagan y ella tendrá que pagar, pero yo no la voy a abandonar. También es mi hija, igual que Ariel. Si ella fuera la responsable y está presionada o amenazada por esta chica (Liliana Castro), que lo diga. Que confiese para poder ayudarla", puntualizó. (Foto: Caretas)
Marco Bracamonte, ex esposo de la asesinada empresaria judía, dijo en declaraciones a la revista Caretas, que en caso de ser hallada su hija Eva como autora intelectual del crimen contra su madre, ella no habría actuado sola, sino que tuvo participación directa en esos hecho, Liliana Castro, la amiga íntima de su hija con quien comparte su residencia.
"¿Se puede pensar que ella (Eva) hizo todo sola? Imposible. Ha tenido la guía, probablemente le han lavado el cerebro para que lo haga, diciéndole mil cuentos, diciéndole mil cuentos y ahora ha terminado expuesta al chantaje, a la extorsión", expresó.
La extorsión que Liliana Castro Mannarelli estaría ejerciendo contra Eva Bracamonte, la fundamenta en conversaciones que sostuvo con David Hugo Rímac Hinostroza, trabajador de la Inmobiliaria Sideral, quien llegó a la empresa a inicios de los sesenta y maneja importante información contable.
Este personaje dio detalles a Marco Bracamonte sobre los "abultados gastos" de Liliana Castro, desde que asumió la gerencia general de la inmobiliaria en agosto del 2008. Asimismo, de la transferencia a su nombre del 50% de acciones de Sideral, y de los "costosos honorarios" que recibe el abogado Julio Rodríguez que defiende la pareja de jóvenes involucrados en este sonado caso.
"Me dijo que Eva estaba siendo presionada por esta chica Castro para transferirle el 50% de las acciones de la empresa. Cuando mi hija le dio la orden al señor Rímac para que proceda con la transferencia, fue después de una larga discusión a gritos destemplados entre ellas dos. Al parecer Eva no estaba muy de acuerdo con esa transferencia", indicó Marco Bracamonte.
Por el momento, no se sabe si la Fiscalía solicitará la declaración de David Hugo Rímac Hinostroza, aunque Marco Bracamonte adelantó, que el aludido "no quiere decir nada más" por temor a perder el trabajo y arriesgar su integridad física.
"Los errores se pagan y ella tendrá que pagar, pero yo no la voy a abandonar. También es mi hija, igual que Ariel. Si ella fuera la responsable y está presionada o amenazada por esta chica (Liliana Castro), que lo diga. Que confiese para poder ayudarla", puntualizó. (Foto: Caretas)
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