Virgen de la Puerta unió corazones en Trujillo

“Se marcha en medio de lágrimas, aplausos y oraciones. Promete volver, para seguir brindando a su pueblo infinitas bendiciones”.

Así va alejándose la venerada imagen de la Virgen de la Puerta, advocación mariana que visitó a la urbe primaveral en época de frío intenso para traer su calor de madre eterna y dejar un halo de paz en medio de tanto brote de gratuita violencia social.

La “Mamita Celestial” llegó un 3 de agosto tras recorrer más de 75 kilómetros, acompañada de cientos de fieles que se volvieron miles a medida que avanzaban las horas.

La patrona de Otuzco estuvo en el Santuario de Huamán y llegó hasta olvidados sectores del balneario de Buenos Aires, allí donde prima la incertidumbre por el accionar delictivo y las consecuencias de la dañina erosión costera.

Gracias a un excepcional trabajo de coordinación entre la Hermandad de la Virgen de la Puerta y el Arzobispado de Trujillo, la imagen pudo llegar en esta ocasión a lugares antes insospechados como los populosos distritos Moche, Salaverry y El Porvenir.

Fue en este último distrito donde su presencia resultó ser más que trascendente.

En El Porvenir se vive un clima de agobio por el accionar de bandas criminales que extorsionan y asaltan a su gusto, contando con la complicidad de la inacción de la Policía Nacional. La presencia de la Virgen de Puerta ha resultado ser allí un bálsamo para curar las heridas del alma.

Pero, la sagrada imagen visitó también a los internos del penal El Milagro, un lugar hacinado y deprimente que recibió el fulgor de la cálida mirada de la madre de Cristo. Preciosas ofrendas florales la recibieron y los reos tuvieron la oportunidad de colmarla de muestras de cariño y, como no, de promesas de futura enmienda.

A pesar de la irrupción de un galopante materialismo, la verdad es que la Virgen de la Puerta ha unido corazones demostrando que la fe goza de muy buena salud en Trujillo.

La Plaza de Armas fue por ello escenario de multitudinaria devoción. Se calcula en más de 50 mil, el número de fieles quienes llegaron de todos los puntos cardinales el día miércoles 7 de agosto para gritar a viva voz su amor por la dulce figura maternal con motivo de la procesión de la imagen bendita.

Llegó el momento de la partida y los fieles trujillanos despiden a la “mamita”, pues saben que la esperan allá en Otuzco, con el mismo cariño de siempre, para cuidarla y venerarla día a día en medio de cánticos que se elevan al cielo pero que también perduran en la memoria.

“Virgencita de la Puerta no nos abandones jamás. A  tu casita en Otuzco, pronto te vamos a visitar”.

Por: Jorge Rodríguez

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