Celulares ¿cuáles son los elementos químicos más usados en la construcción de un smartphone?

Los teléfonos móviles se han convertido en una parte indispensable de nuestras vidas, y todos los días se fabrican millones de ellos en el mundo. Sin embargo, detrás de estos dispositivos tan populares, hay una compleja combinación de elementos químicos que los hacen funcionar. Un teléfono móvil puede contener varios elementos químicos, aunque la cantidad exacta varía según el modelo y la marca del teléfono. En general, un teléfono móvil típico contiene, aproximadamente, entre 40 y 50 elementos químicos diferentes en su estructura y componentes.

El silicio es uno de los elementos químicos más utilizados en la fabricación de teléfonos móviles, ya que se utiliza para crear microprocesadores y circuitos integrados. También se utilizan otros elementos como aluminio, cobre, oro, plata, litio y hierro, entre otros. La mayoría de estos elementos se utilizan en la construcción de la placa de circuito impreso, la batería, la pantalla, la carcasa y otros componentes.

A pesar de esto, los fabricantes de teléfonos móviles han estado buscando nuevas formas de reducir la dependencia de los materiales tradicionales. Un nuevo material que ha sido objeto de mucha atención en la industria de los teléfonos móviles es el grafeno; que, además de ser resistente y ligero, cuenta con propiedades eléctricas y térmicas excepcionales.

Además, se ha demostrado que puede ser utilizado en la fabricación de baterías más duraderas y eficientes. Debido a estas cualidades, el grafeno podría tener estas utilidades asociadas a la confección de smartphones:

• Pantallas flexibles. El grafeno es muy flexible y resistente, por lo que podría utilizarse para crear pantallas más delgadas y ligeras, una opción interesante para el emergente mercado de teléfonos plegables.
• Baterías más eficientes. El grafeno tiene una alta conductividad eléctrica y puede cargarse muy rápidamente. Las baterías de grafeno podrían durar mucho más tiempo y cargarse en menos minutos que las basadas en litio.
• Mejora en la velocidad de procesamiento. El grafeno tiene una alta conductividad térmica, lo que significa que podría utilizarse para disipar el calor generado por los procesadores de los teléfonos. Esto permitiría a los chips montados en las placas trabajar a velocidades más altas sin sobrecalentarse, incrementado el rendimiento.
• Mejora en la calidad de las cámaras. El grafeno es casi transparente – la absorción óptica de una sola capa de grafeno es de solo ~2,3% en el espectro visible - y tiene una alta conductividad eléctrica, lo que podría utilizarse para mejorar la calidad de las cámaras en los teléfonos.

Además del grafeno, otros materiales como el germanio y el silicio poroso también están siendo investigados para su uso en la fabricación de baterías. Estos podrían proporcionar una alternativa más segura y sostenible a las baterías de iones de litio, que son conocidas por su propensión a explotar y causar incendios.

Sin embargo, la implementación de nuevos materiales en la industria de los teléfonos móviles no es una tarea fácil, pues deben ser probados exhaustivamente para garantizar su seguridad y confiabilidad, y también deben ser económicamente viables. A pesar de estos desafíos, muchos fabricantes están comprometidos a encontrar soluciones innovadoras y sostenibles para mejorar la experiencia del usuario.