Carl Grimes (Chandler Riggs) se despidió de manera emotiva de la serie sobre zombis que emite AMC.
Desde que inició la temporada 8 de "The Walking Dead", los espectadores fuimos testigos de imágenes interpuestas entre escenas que generaban confusión: Rick Grimes, viejo, con barba canosa, en un futuro al parecer imaginario; y por otro lado, el sheriff llorando sobre una tumba, diciendo que su "piedad prevalece" sobre su ira. Estas imágenes finalmente fueron aclaradas.
"Mi piedad prevalecerá sobre mi ira". Esa es la reflexión de Rick ante la tumba de su hijo, quien aún muerto, le da una lección de humanidad.
ALERTA DE SPOILER
"The Walking Dead" regresó a la pantalla chica demostrándonos la sobrevivencia de Alexandría ante el bombardeo de los Saviors a su comunidad en una alcantarilla. Carl y Siddiq se encargan de habilitar el lugar para que el hijo de Rick ejecute su plan de poner a todos a salvo.
El episodio mostró algunos momentos no vistos en pantalla del preciso instante en que Carl es mordido por un zombi. El hijo del sheriff, sabiendo que su muerte será inminente, dedica toda una tarde a escribirle cartas personales a todos sus amigos despidiéndose.
Volviendo al presente, Carol le pide a los aldeanos de The Kingdom que se pongan bajo resguardo mientras ella busca a Ezhekiel, quien está cautivo de los Saviors liderados por Gavin. En su camino, encuentra a Morgan quien se une a su campaña. El pequeño Henry se ofrece en ayudarla, pero ella se lo niega pues es un niño.
En las alcantarillas, conocemos un poco más del pasado de Siddiq. El joven de origen musulmán le alcanza antibióticos a Rick y le dice que fue médico. Carl yace moribundo pero todavía puede hablar: le dice a su padre que salvó a Siddiq no por ser médico si no porque los necesitaba.
El bombardeo continúa en Alexandría, y se siente hasta las alcantarillas. Michonne le pide a Dwight que vaya a detener a los Saviors, pero éste le dice que será en vano, así que les aconseja lo más sensato en el momento: esperar que se vayan y salir a la superficie.
En The Kingdom, Carol y Morgan se abren paso y empiezan a matar uno a uno a los saviors. Ezhekiel le dice a Gavin que tiene tiempo de arrepentirse, pero el matón cree tener todo bajo control. La confianza le durará poco.
En las alcantarillas, Rick se niega a aceptar la idea de que su hijo está condenado a muerte, pero éste ya se resignó y solo desea despedirse uno a uno de sus amigos, para darles un mensaje de esperanza, y las cartas que les escribió pero sobre todo, llamar a la humanidad de padre para que cese la guerra y el derramamiento de sangre.
Uno de los momentos más emotivos del episodio fue cuando Carl se dirige a la pequeña Judith, su hermana, aquella que siempre defendió y cuidó para decirle que honre a su padre, que siempre haga caso a lo que le diga, y de inmediato le regala el emblemático sombre de Sheriff, "aquel que le hacía sentir tan fuerte como papá". La pequeña estalla en llanto.
En The Kingdom, Gavin y sus matones son cercados en el teatro. Ellos esperan ansiosos para matar a sus atacantes, pero por la retaguardia les da la sorpresa la dupla asesina formada por Morgan y Carol. Ambos reducen a todos y dejan a Gavin herido, salvando a Ezhekiel de ser asesinado como escarmiento por los saviors.
Rick y Michonne sacan a Carl de las alcantarillas cuando las cosas se calman en Alexandría. Su comunidad está ardiendo en fuego tras el intenso bombardeo de los saviors. El joven sabe que su momento está cerca y por eso es llevado hasta su casa para despedirse del mundo.
En The Kingdom, Morgan castiga duramente a Gavin, asustándolo antes de matarlo. Ezhekiel y Carol tratan de convencerlo de que no lo haga, pues su propósito no es convertirse en un asesino sanguinario. Morgan está convencido de que debe matarlo, pero antes de que lo intenta, por la espalda el pequeño Henry le clava su vara en el cuello, ante la mirada atónita de todos. Ezhekiel y Carol se lo increpan al pequeño, pero él sintió que debía hacerlo.
En Alexandría en ruinas, Carl le confiesa a su padre que tiene visiones de él en el futuro, y empezamos a ver las imágenes de Rick con barba canosa, paseando por una comunidad que vive en armonía. Judith lo acompaña y saluda uno a uno de los lugareños.
Carl relata que gracias a su padre, él pudo ser una mejor persona, y que se inspiró en la dosis de humanidad que Rick tuvo con Woodbury cuando estaban en plena guerra contra el Gobernador. El sheriff le cuenta que lo hizo por el amor que le tenía a sus hijos y su deseo de protegerlos.
Los televidentes seguíamos viendo el relato de Carl de un futuro prometedor para su comunidad y sorprendentemente, Judith saluda a un envejecido Negan, quien trabaja en un huerto, junto a los demás alexandrinos. Este mensaje a Rick de que debe dejar las heridas del pasado y luchar hombro a hombro entre todos para ser comunidades unidades.
Carl coge el arma, y después de despedirse de Rick, de Michonne, asegura que él será quien termine con su vida. El sheriff y su pareja aguardan fuera de la casa, hasta que escuchan un silencioso disparo que pone fin a la existencia de uno de los personajes más queridos de The Walking Dead.
"Mi piedad prevalecerá sobre mi ira"... la reflexión de Rick para formar un mundo mejor.
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