Los parques eólicos marinos en las costas de Florida serán prohibidos para dar prioridad a la expansión de la industria energética.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó la ley HB 1645 que elimina el término “cambio climático” y su prioridad en la agenda pública del estado a la hora de tomar decisiones sobre política energética.
Aunque pueda parecer solo una cuestión discursiva, esta eliminación habilita a tomar muchas medidas que antes podían ser cuestionadas por incumplir la ley. Es importante recordar que, desde la administración de Rick Scott, las leyes en materia de protección del medioambiente son desmanteladas.
Con la acción de DeSantis se termina de anular lo que quedaba de esa reglamentación. Al respecto, activistas medioambientalistas se pronunciaron en contra y afirmaron que la ley es un peligro contra el ecosistema que hay en Florida.
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Políticas perjudiciales
La política energética pasará por la disponibilidad y los costos de la energía, y la normativa comenzará a regir el 1 de julio. Dado que Florida es una zona sensible a desastres naturales y sucesos climáticos intensos, esta ley favorecerá a la proliferación de este tipo de eventos.
Además, los parques eólicos marinos y cercanos a las costas serán prohibidos para dar prioridad a la expansión del gas natural. También, requerirá que las cooperativas eléctricas y las ciudades tengan planes de restauración de huracanes para poder recibir fondos estatales.
La norma impide a los gobiernos locales establecer restricciones a estas políticas y derogará las políticas climáticas de la era Obama.
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