El hombre que padece de esquizofrenia ha permanecido encerrado en una jaula, acondicionada en su casa, por más de diez años. Él es asistido por su familia.
Wu Yuanhong, de 42 años, vive en un pueblo en Ruichang, en la provincia de Jiangxi, en China. A los 15 años se le diagnosticó esquizofrenia y debido a esto su familia lo ha tenido apartado de la sociedad.
En 2001 mató a un joven de tan solo 13 años, que vivía en el mismo pueblo de Lijiachong, y fue arrestado por las autoridades del lugar. Sin embargo, fue liberado por la enfermedad que padecía ya que no podía responder por sus actos.
Es por ello que su madre, Wang Muxiang, creó una jaula para mantener a su hijo dentro por el temor de que vuelva a cometer algún crimen.
En las zonas rurales de China se calcula que hay cerca de 16 millones de personas con enfermedades mentales, las cuales no cuentan con los recursos necesarios y especialistas calificados para atender estos casos.
Comparte esta noticia