La reacción del menor fue porque su abuela Bárbara Weeks, de 60 años, no le quiso comprar un juguete.
El darle un puñetazo en la cara a su abuela le costó caro a un niño estadounidense de 11 años, quien enfrenta cargos de violencia doméstica, según un informe de la Policía de Dayton.
La reacción del menor fue porque Bárbara Weeks, de 60 años, no le quiso comprar un juguete.
El niño fue detenido en un almacén de la ciudad de Dayton, en el estado de Ohio, tras ser denunciado el incidente por un testigo.
Según Barbara Weeks, habría recibido otro golpe de su nieto si no hubiera huido.
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