A nivel mundial, la primera causa de muerte son las enfermedades cardiovasculares, es por esto, que hoy les queremos recordar la gran importancia de este órgano.
Cada 29 de setiembre se conmemora el Día Mundial del Corazón con la idea de propiciar el cuidado y la prevención de enfermedades que afectan a este importante órgano, pero ¿qué tanto sabemos de él?
El corazón humano es el músculo que más trabaja en el cuerpo: Empieza a latir a partir del día 16 después de la concepción y no se detiene hasta el momento de nuestra muerte. La frecuencia de latido por minuto varía de 60 a 90. Así, en un día late como 100000 veces.
El corazón es la bomba que envía la sangre hacia todos los tejidos de nuestro organismo: envía 5 litros por minuto de sangre, es decir, más de 7000 litros en 24 horas. Además, envía sangre hacia su propio sistema vascular a través de las arterias coronarias.
A nivel mundial la primera causa de muerte son las enfermedades cardiovasculares, es por esto, que hoy les queremos recordar la gran importancia de este órgano.
Aunque no podemos modificar algunos factores de riesgo, como los antecedentes familiares, el sexo o la edad, hay algunas medidas de prevención clave que debemos adoptar para reducir el riesgo de padecer enfermedades cardíacas. Estos son los consejos:
1. No fumar
Fumar o consumir tabaco de cualquier tipo es uno de los factores de riesgo más importantes para padecer una enfermedad cardíaca. Las sustancias químicas del tabaco pueden dañar el corazón y los vasos sanguíneos, lo que provoca el estrechamiento de las arterias debido a la acumulación de placas (aterosclerosis). Con el tiempo, la aterosclerosis puede causar un ataque cardíaco.
2. Hacer ejercicio
Hacer actividad física a diario o por lo menos tres veces por semana y de forma regular puede reducir el riesgo de sufrir enfermedades del corazón. En general, debemos hacer ejercicio moderado, como caminar a paso rápido aproximadamente 30 minutos.
3. Dieta saludable
Una dieta rica en frutas, vegetales, cereales integrales, menestras, productos lácteos sin grasa o con bajo contenido de grasa, carnes magras y pescado como parte de una alimentación saludable y evitar comer alimentos con demasiada sal y azúcar ayudarán a proteger el corazón. Evitar casi por completo grasas saturadas y trans. Seguir una dieta saludable para el corazón también significa controlar la cantidad de alcohol que se bebe. Si se decide tomar alcohol, beber con moderación es mejor para el corazón. Para los adultos sanos, esto significa hasta una copa por día de licores destilados con 40 por ciento de graduación alcohólica. Beber demasiado alcohol puede convertirse en un riesgo para el corazón.
4. Mantener un peso saludable
La obesidad, especialmente tener exceso de peso en la parte media del cuerpo, aumenta el riesgo de padecer una enfermedad cardíaca. El exceso de peso puede provocar afecciones que aumenten las probabilidades de padecer una enfermedad cardíaca, como presión arterial alta, colesterol alto y diabetes.
5. Dormir bien
Las personas que no duermen lo suficiente tienen un mayor riesgo de sufrir obesidad, presión arterial alta, ataques cardíacos, diabetes y depresión. La mayoría de los adultos necesitan de siete a nueve horas de sueño por noche. Si uno tiene mucho sueño durante el día, dolor de cabeza, falta de atención podría estar padeciendo de apnea del sueño, trastorno por el cual las personas tienen microdespertares durante las horas del sueño porque no reciben suficiente cantidad de oxígeno. Esto se produce sobre todo en personas con sobrepeso, obesas o con problemas en las vías respiratorias.
6. Controlar el estrés
Encontrar formas de controlar el estrés, como la actividad física, los ejercicios de relajación o la meditación, puede mejorar tu estado de salud.
7. Realizarse análisis regulares para la detección de enfermedades
La presión arterial alta, la diabetes, los triglicéridos y el colesterol altos pueden dañar el corazón y los vasos sanguíneos, pero ninguna de estas patologías da síntomas, así que, si no nos hacemos análisis para detectarlos, no podremos saber si tenemos estas afecciones. Además, es importante que a partir de los 45 años nos realicemos un chequeo cardiológico completo.
Tomando en cuento estos consejos, además de cuidar nuestro corazón, nuestra salud mejorará notoriamente, mejorando así nuestra calidad de vida.
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