Asimismo recomendaron a los diabéticos evitar los dulces de absorción rápida como la miel y el azúcar rubia y blanca.
La dieta alimenticia de un paciente diabético, si bien debe evitar los azucares, puede incluir otros alimentos como la ingesta de harinas en porciones moderadas, así como el consumo de frecuente de alimentos de grano entero, frutas y vegetales; excluyendo de forma definitiva el alcohol.
Así lo sostuvo el jefe del Servicio de Endocrinología del Hospital Dos de Mayo, Hugo Arbañil, al tiempo de precisar que los diabéticos deben evitar los dulces de absorción rápida como la miel y el azúcar rubia y blanca.
Por el contrario, las harinas no pueden quitarse totalmente de la dieta diaria, debe preferirse su consumo, teniendo cuidado con las cantidades que cada persona puede comer dependiendo de su actividad física, expresó.
"Respecto a lo que deben comer estos pacientes, hay que decir que pueden comer de todo, pero en cantidades medidas, tratando de no mezclar muchas porciones de harinas y suplementar fibra dietaria", expresó.
Del mismo modo, dijo que el plan alimenticio es particular para cada paciente y debe ser diseñado por un equipo de especialistas.
La dieta variará si la persona usa insulina, ya que en dicho caso se necesitará fraccionar las tomas en al menos seis porciones.
De acuerdo con el especialista, el paciente debe cuidarse de cuándo y cuánta cantidad de carbohidratos consume. Debe comer grandes cantidades de alimentos de grano entero, frutas y vegetales, evitar las grasas y limitar el alcohol y los dulces.
"La alimentación sana ayuda a reducir el azúcar de la sangre. Es una parte fundamental del manejo de la diabetes, ya que controlando la glucemia (azúcar en la sangre) se pueden prevenir las complicaciones de esta enfermedad", puntualizó Arbañil.
Además en caso el paciente realice deporte o algún tipo de actividad física requerirá de una mayor cantidad de calorías en su dieta diaria, a diferencia de aquellos que no hacen deporte.
- Andina
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