Especialistas del Ministerio de Salud advierten que la neumonía se puede presentar cuando las enfermedades respiratorias no son tratadas en forma oportuna y adecuada.
La neumonía constituye la complicación de una infección respiratoria que afecta a los pulmones y puede ser mortal, sobre todo en niños menores de cinco años y en aquellas personas que tienen el sistema inmunológico deprimido, desencadenándose en cuestión de horas.
Así lo señaló Rosa Vilca, integrante de la Dirección Integral de Salud del Ministerio de Salud, quien precisó que la neumonía se puede presentar cuando las enfermedades respiratorias no son tratadas en forma oportuna y adecuada.
Esto ocurre porque los pacientes recurren a la automedicación, abandonan el tratamiento médico, o simplemente no acuden a un establecimiento de salud para su atención.
"La gente no lleva a sus hijos al médico hasta que observa que los síntomas persisten y la salud no mejora y cuando llegan al centro de salud, suelen presentar malestar general, tos con abundantes flemas y dificultad para respirar", señaló.
En tal sentido, exhortó a la población a evitar la automedicación o los remedios caseros y, sobre todo, a considerar siempre las medidas preventivas como evitar cambios bruscos de temperatura, llevar una buena alimentación e ingerir abundantes líquidos.
"Mientras más pequeños son los niños, más rápido se debe buscar ayuda médica y por ningún motivo suministrarles medicamentos sin receta médica", señaló.
La especialista indicó que cuando el niño tiene fiebre se le debe mantener con ropas ligeras, evitar las corrientes de aire, y observarlo de manera frecuente por la posibilidad que desarrolle alguna manifestación de empeoramiento, en cuyo caso deberá trasladarlo rápidamente al servicio de salud más cercano:
Recordó que los síntomas de la neumonía son la respiración con dificultad y de manera muy rápida; hundimiento en la parte inferior del tórax o entre las costillas al respirar, dificultad para beber, somnolencia anormal y fiebre por más de 24 horas.
Asimismo, aconsejó que en el caso de tratarse de un niño afectado por la neumonía se le debe dar sus alimentos habituales, a fin de prevenir la desnutrición.
Si el niño es menor de seis meses o aún no ha iniciado su alimentación complementaria, se recomienda a la madre amamantarlo con frecuencia.
Vilca explicó que el niño con infección respiratoria aguda pierde más líquidos de lo normal a través de las secreciones, por lo que se deben reponer estas pérdidas, para mantener una adecuada hidratación del organismo.
También se debe evitar el humo en la casa, ya sea de cigarrillo, kerosene o leña y evitar que el niño esté al lado de personas que sufren alguna enfermedad contagiosa.
- Andina
Así lo señaló Rosa Vilca, integrante de la Dirección Integral de Salud del Ministerio de Salud, quien precisó que la neumonía se puede presentar cuando las enfermedades respiratorias no son tratadas en forma oportuna y adecuada.
Esto ocurre porque los pacientes recurren a la automedicación, abandonan el tratamiento médico, o simplemente no acuden a un establecimiento de salud para su atención.
"La gente no lleva a sus hijos al médico hasta que observa que los síntomas persisten y la salud no mejora y cuando llegan al centro de salud, suelen presentar malestar general, tos con abundantes flemas y dificultad para respirar", señaló.
En tal sentido, exhortó a la población a evitar la automedicación o los remedios caseros y, sobre todo, a considerar siempre las medidas preventivas como evitar cambios bruscos de temperatura, llevar una buena alimentación e ingerir abundantes líquidos.
"Mientras más pequeños son los niños, más rápido se debe buscar ayuda médica y por ningún motivo suministrarles medicamentos sin receta médica", señaló.
La especialista indicó que cuando el niño tiene fiebre se le debe mantener con ropas ligeras, evitar las corrientes de aire, y observarlo de manera frecuente por la posibilidad que desarrolle alguna manifestación de empeoramiento, en cuyo caso deberá trasladarlo rápidamente al servicio de salud más cercano:
Recordó que los síntomas de la neumonía son la respiración con dificultad y de manera muy rápida; hundimiento en la parte inferior del tórax o entre las costillas al respirar, dificultad para beber, somnolencia anormal y fiebre por más de 24 horas.
Asimismo, aconsejó que en el caso de tratarse de un niño afectado por la neumonía se le debe dar sus alimentos habituales, a fin de prevenir la desnutrición.
Si el niño es menor de seis meses o aún no ha iniciado su alimentación complementaria, se recomienda a la madre amamantarlo con frecuencia.
Vilca explicó que el niño con infección respiratoria aguda pierde más líquidos de lo normal a través de las secreciones, por lo que se deben reponer estas pérdidas, para mantener una adecuada hidratación del organismo.
También se debe evitar el humo en la casa, ya sea de cigarrillo, kerosene o leña y evitar que el niño esté al lado de personas que sufren alguna enfermedad contagiosa.
- Andina
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