Recomiendan a los padres evitar la automedicación y que, ante cualquier síntoma o molestia en sus pequeños, los lleven al establecimiento de salud más cercano.
Los bebés y niños menores de 2 años no deben ser tratados con antigripales, jarabes expectorantes o para controlar la tos, descongestionantes nasales o antihistamínicos, porque ponen en riesgo su vida, informó la Dirección General de Medicamentos, Insumos y Drogas (Digemid).
Entre los efectos adversos del uso de estos productos en los pequeños figuran las convulsiones, taquicardia, disminución de niveles de conciencia y la muerte, sostuvo el jefe del Equipo de Atención Farmacéutica de la Digemid, Aldo Álvarez Risco.
Resaltó además que el uso de antigripales y jarabes para la tos puede ocultar los síntomas de enfermedades más graves como Infección Respiratoria Aguda (IRA), faringitis, amigdalitis, asma y neumonía.
Álvarez recomendó a los padres evitar la automedicación y que, ante cualquier síntoma o molestia en sus pequeños, los lleven al establecimiento de salud más cercano.
“No se debe administrar medicamentos a los niños sin consultar a un profesional de salud, ni siquiera los fármacos de venta sin receta médica”, concluyó.
Comparte esta noticia