Caso Laura Bozzo: mitos y verdades del lifting de rostro

Laura Bozzo parece haber derrotado a su peor enemigo: el tiempo. Los años van dejando huellas en la piel que muchos aceptamos con resignación. Los rebeldes cuentan con procedimientos quirúrgicos para lucir veinte o treinta años más jóvenes.

Hablamos de las cirugías plásticas. Aunque se miran con desconfianza, cada vez más personas recurren a ellas para lucir mejor. Una de estas operaciones es el “Lifting” de cuello y cara. ¿En qué consiste?

"Es un procedimiento quirúrgico mínimo, en el cual el objetivo es levantar la piel que está cayendo o ha caído por efecto de la gravedad. Es un levantar, un levantamiento de tejidos, en este caso probablemente rostro", dijo el dermatólogo Juan Quintero.

Otto Cedrón, cirujano que operó a la misma Laura Bozzo, indicó que hay un error en la gente al creer que solo se estira la piel del paciente. Lo que se hace en este tipo de operaciones es colocar en su lugar los músculos faciales caídos por acción del paso de los años.

Pero, ¿quién puede someterse a un lifting?, existen riesgos que hay que evaluar por parte de los profesionales. Si el paciente sufre de alergias, problemas cardíacos, insuficiencia respiratoria, hipertensión o tiene diabetes, hay la posibilidad de que la operación no se realice. Esto se definirá en el pre operatorio. 

La edad ideal para practicarse un lifting es 45 a 50 años, así parecerá de 33 o 38 años. Un buen liftin te hace lucir 12 años menos. La operación cuesta entre los 3 mil y 5 mil dólares. Recuperarse de la intervención toma un mes. Regresar al trabajo quince días.

Recuerde que un lifting debe ser realizado por médicos cirujanos colegiados, de esta manera no habrá mayor sorpresa que verlo mucho más joven.