La gran ironía de Donizetti es que sus grandes óperas siempre trataron sobre la reclusión y el sufrimiento por la psicosis, sucesos que vivió en vida.
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Pese a que nació en una familia pobre un 29 de noviembre de 1797, su talento artístico de componer óperas lo llevó a la fama y fortuna. Hablamos del gran compositor italiano Gaetano Donizetti, cuya obra más popular fue ‘Una furtiva lágrima’. Es tan famosa esta ópera que hasta fue cantada por el intérprete peruano, Juan Diego Florez.
Donizetti desde joven presentó grandes dotes para la ópera. A los 21 años estrenó su primera composición, sin embargo, fue a los 33 años cuando se consagró como un grande con su ópera Ana Bolena. Luego compondría más de 70 óperas en toda su carrera, comentó el Consejero Médico de RPP Noticias, Elmer Huerta, en el programa La Rotativa del Aire.
La pésima condición de salud que tuvo Gaetano Donizetti refleja lo que significó tener sífilis en el siglo XIX. “Una enfermedad incurable y mortal”, la describió Huerta.
Esta enfermedad de transmisión sexual que recién pudo curarse en 1945, con el descubrimiento de la penicilina, consta de tres niveles. La primera etapa presenta una herida indolora en los genitales que desaparece espontáneamente; la segunda etapa aparece luego de unas semanas y origina fiebre y ronchas en el cuerpo, también desaparece de un momento a otro.
Huerto agregó que la terciaria y etapa final se desarrolla luego de que pasen entre cinco y treinta años después. En este momento la sífilis ataca órganos internos como el cerebro y ocasiona la neurosífilis.
La psicosis lo afectó gravemente
A partir de las cartas que Donizetti enviaba a sus amigos y familiares, investigadores de la Universidad de Yale reconstruyeron el curso de la sífilis que afecto al gran compositor italiano. El análisis confirmó que atacó su cerebro, dijo Huerta.
Se cree que se contagió en 1827, a los 30 años, un año antes de que se case con Virginia Vasselli, con quien tuvo tres hijos que nacieron prematuros y fallecieron.
Luego de dos o tres años de haberse contagiado de sífilis, se manifestaron algunos síntomas cerebrales como dolores de cabeza, cambios de carácter y convulsiones. En 1835, cuando era famoso y tenía 38 años, enfermó. Y a sus 49 años, estaba tan grave que su sobrino tuvo que internarlo, con engaños, en un sanatorio de enfermos mentales. Toda esa temporada la vivió con el sufrimiento de la psicosis que padecía.
Finalmente, falleció el 8 de abril 1848 con 50 años.
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