Leer las etiquetas de los alimentos cuando realizamos las compras promueve la adopción de una dieta que cuida su corazón y promueve un nivel saludable de colesterol en la sangre.
Leer las etiquetas de los alimentos cuando realizamos las compras promueve la adopción de una dieta que cuida su corazón y promueve un nivel saludable de colesterol en la sangre.
La Fundación Española del Corazón recuerda que el etiquetado es la principal fuente de información para los consumidores. Aporta información clave para conocer las propiedades de los alimentos y las cantidades de grasas, azúcares, fibra, sodio y colesterol del producto.
¿Qué hay que observar en las etiquetas? Reproducimos algunos datos del 20minutos.es:
Grasas
En primer lugar, la cantidad y el tipo de grasa presente en el alimento. Las de tipo mono y poliinsaturadas (aceite de oliva, aguacate, frutos secos, etc.), ejercen un efecto beneficioso, ayudando a controlar los niveles de colesterol en sangre.
En cambio, las grasas saturadas, que encontramos en productos de origen animal, carnes grasas y algunos aceites vegetales, pueden generar un aumento de los niveles de colesterol.
Fibra
La fibra ayuda a reducir la absorción de colesterol y las grasas saturadas de la dieta. Se recomienda aumentar la cantidad de fibra consumiendo a diario verduras y hortalizas, legumbres y cereales integrales.
Sodio
Una dieta con un alto contenido en sodio (sal) puede aumentar la tensión arterial. La hipertensión es otro factor de riesgo para el desarrollo de enfermedades del corazón.
Calorías
Un exceso de calorías en la dieta puede generar sobrepeso, especialmente si se combina con sedentarismo. La obesidad abdominal está relacionada con un incremento de riesgo cardiovascular.
Azúcares
Los hidratos de carbono de absorción rápida o azúcares pueden transformarse en grasa en nuestro hígado si se consumen en exceso, lo que puede empeorar la salud cardiovascular.
También es aconsejable tener en cuenta los alimentos en sus versiones magras o desnatadas. En el caso de las carnes, se puede reducir hasta un 20% menos del colesterol aportado de este grupo optando por las variantes magras.
Mientras tanto, en el caso de los lácteos, al elegirlos siempre desnatados se pueden reducir diariamente un 80% las grasas saturadas provenientes de estos alimentos. Para reducir el colesterol, los lácteos reductores del colesterol son una buena opción para incorporar a la alimentación diaria.
¿Y qué cantidad?
Los alimentos se clasifican según la cantidad nutricional de cada componente por cada 100gr. o 100 ml. de producto:
Bajos en grasas son los que tienen menos de 3 gr. en los alimentos sólidos y menos de 1,5 gr. en los líquidos.
Bajos en azúcares son aquellos que contienen menos de 5 mg. de azúcar.
Rico en fibra, alimento que tienen un mínimo de 6gr. de fibra por cada 100 gr.
Bajos en sodio, contienen menos de 0,12 gr. de sodio.
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