Algunos de los efectos de la intoxicación por alcohol (como la euforia y las inhibiciones sociales bajas) son fundamentales para la deseabilidad del alcohol como una bebida y su historia como la droga recreativa más extendida del mundo.
Es sabido que unas copas pueden hacer que veamos al sexo opuesto más atractivo. No es que esa persona se haya vuelto más bella de un momento a otro, lo que sucede es que el alcohol produce un efecto que distorsiona la realidad y lo que vemos.
De hecho la Universidad de Roehampton, en Londres, concluyó mediante un estudio que las personas tras consumir alcohol pierden en gran medida la capacidad de detectar rostros asimétricos.
El estudio recogido por el canal científico Discovery consistió en consultar a grupos de jóvenes sobrios y ebrios, lo que era chequeado con un test de alcoholemia.
Posteriormente a ambos grupos se les presentó imágenes de rostros perfectamente simétricos y otros sutilmente asimétricos. Esto para que eligieran cuáles les parecían más atractivos y también se les pidió detectar las caras que eran simétricas.
Los sobrios prefirieron las caras simétricas, contrario a los jóvenes en estado de embriaguez. Además, quienes no habían consumido alcohol detectaban de forma más eficiente la simetría de los rostros.
Este estudio arrojó un curioso resultando, y es que los hombres bajo la influencia del alcohol son menos propensos a perder la capacidad de detección de la simetría de los rostros a comparación de las mujeres en ese mismo estado. Los autores del estudio, creen que ello se puede deber a que los hombres suelen estimularse más por la vista.
Para saber qué es lo que provoca este efecto de ver al sexo opuesto más atractivo, la revista masculina Men’s Health elaboró una lista intentando explicar el proceso que ocurre a nivel cerebral cuando se bebe alcohol.
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