En ciertos momentos, aprender a guardar silencio puede ser más beneficioso para nuestras relaciones y bienestar emocional. Conoce por qué en algunas situaciones es preferible optar por el silencio.
Vivir bien
Miguel Figueroa señala que hay momentos en los que es mejor guardar silencio
Es muy común que en nuestro día a día, solamos decir cosas que, al cabo de un tiempo, desearíamos no haber dicho. Puede ser por enojo, frustración o simplemente por querer ser parte de la conversación. Este impulso de hablar sin pensar antes puede llevarnos a malentendidos, tensiones e incluso arrepentimientos. Sin embargo, existen situaciones en las que es mejor callar y permitir que las circunstancias hablen por sí mismas.
El biólogo y especialista en comportamiento humano primitivo, Miguel Figueroa, explica que la tendencia a reaccionar verbalmente ante ciertos estímulos es algo muy natural y comparable al instinto de defensa en los animales. "Es como el perro que ladra cuando se siente amenazado", menciona. "Nosotros también reaccionamos cuando algo perturba nuestra tranquilidad, pero ¿realmente va a ayudar esa reacción?".
Para Figueroa, aprender a guardar silencio en ciertos momentos puede ser una herramienta valiosa en nuestras relaciones y en nuestra paz personal. A continuación, Figueroa comparte cinco situaciones específicas en las que el silencio puede ser la mejor respuesta. Entender estas circunstancias puede ayudarnos a tomar mejores decisiones sobre cuándo hablar y cuándo es preferible callar.
1. Cuando todos están hablando al mismo tiempo
En reuniones o encuentros grupales, suele ocurrir que todos hablan a la vez, generando un ambiente de ruido y desorden. Muchas veces, queremos añadir nuestra opinión solo para no sentirnos excluidos, pero esto contribuye al caos general. Figueroa sugiere que, en estos casos, quedarse en silencio puede ayudar a disminuir el desorden y a hacer que las palabras tengan más impacto en el momento adecuado.
2. Cuando te preguntan solo para interrumpirte
A veces, alguien inicia una conversación haciéndote una pregunta, pero luego te interrumpe para contar su propia experiencia. "Aquí, la persona en realidad busca una oportunidad para hablar de sí misma", explica Figueroa. En estas situaciones, es mejor ceder el espacio y evitar gastar energía en una conversación que no te está considerando. Callar no solo evita un momento incómodo, sino que también te ayuda a gestionar mejor tus respuestas.
3. Cuando estás negociando algo importante
En una negociación, como al vender un producto o servicio, el impulso de hablar puede jugar en tu contra. Cuando la otra persona cuestiona tu precio o propuesta, Figueroa recomienda esperar y escuchar, en lugar de apresurarte a ceder. Mantener el silencio en estos momentos permite que la otra parte exprese sus expectativas y, a su vez, te da más control sobre el resultado.
4. En situaciones de emergencia
Durante una emergencia, todos tienden a opinar y querer colaborar, pero hablar de más puede obstaculizar las acciones rápidas. Figueroa sugiere que, en estos casos, es mejor hacer silencio y permitir que alguien con experiencia tome el liderazgo. En situaciones de crisis, el silencio facilita una respuesta más coordinada y eficaz, lo cual es vital para resolver el problema con rapidez.
5. Cuando estás recibiendo retroalimentación
Escuchar críticas o sugerencias suele activar nuestras defensas, haciéndonos querer responder de inmediato para justificarnos. Figueroa enfatiza la importancia de quedarse en silencio al recibir retroalimentación, aunque pueda ser incómodo. Tomarse un tiempo para reflexionar sin responder ayuda a procesar la información objetivamente y a aprovechar las críticas para mejorar en lugar de reaccionar impulsivamente.
Vivir bien
Estas son las 5 situaciones en donde es recomendable mejor guardar silencio
Para Miguel Figueroa, el silencio en estos momentos no es simplemente “no hablar”; es una herramienta que permite ser más conscientes y efectivos en nuestras relaciones. El silencio nos brinda la oportunidad de evaluar si lo que queremos decir realmente suma o si es mejor dejar que las emociones se asienten antes de actuar.
A veces, callar es una habilidad difícil de dominar, pero en estos casos específicos, puede ser la mejor decisión para fortalecer nuestras relaciones y conservar la calma interior.
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