Si te arrepientes de un tatuaje, bórralo o hazte uno temporal

Un tatuaje, implica una modificación a nuestro aspecto natural, puede estar motivado por una moda, baja autoestima, curiosidad, un arrebato o porque le damos el valor de una cábala de la suerte. Pero hasta cuando decimos 'te voy a amar para toda la vida', podemos dar marcha atrás. Del mismo modo, están quienes se arrepienten de un dibujo en su piel y optan por borrarlo.

"Las personas van probando qué les cae mejor, luego se dan cuenta que algo no les gusta y ya no lo quieren...La motivación por la que alguien se hace un tatuaje, es diferente. Lo más común son los problemas de autoestima, aparentemente son bien seguros pero esconden detrás de esa careta una profunda inseguridad y los depresivos pueden tener una fachada de felices", comenta el psicoterapeuta José Baldeón.
 
La única opción para eliminar un tatuaje es a través del láser, el modo más seguro, aunque eso no quita que sea un procedimiento doloroso y costoso.

Un primer informe clínico sobre tatuajes y perforaciones de la American Academy of Pediatrics (AAP) de Estados Unidos, ofrece una guía a médicos y padres para orientar a los adolescentes en torno a un deseo cada vez más frecuente por el arte corporal.

El informe señala que los médicos deben eliminar la concepción errada de una forma de autolesión no suicida y consultar al paciente si está considerando hacerse un tatuaje, para hacerle notar las posibles repercusiones en el ámbito laboral y familiar.

En EE.UU. aproximadamente la mitad de las personas de 18 a 30 años tienen alguna clase de perforación o tatuaje, en el Perú la tendencia es similar, aunque no tenemos una estadística oficial.

Proceso de borrado y costo

Eliminar un tatuaje de tinta negra y vegetal, es relativamente más fácil que retirar uno de tinta sintética y que incluya varios colores. "La piel no va a quedar exactamente igual, siempre va haber un tomo medio gris claro. Pueden ser hasta 10 sesiones, y se hacen una cada tres semanas", explica la médico dermatóloga de EsSalud Giuliana Nieto.

La especialista precisa que el procedimiento queda a cargo de un dermatólogo/a, quien antes debe evaluar al paciente, para indicarle qué tipo de laser necesita y el número de veces que deberá ser intervenido. "Es más fácil de eliminar un tatuaje reciente, que uno antiguo. La pintura se pigmenta más en la piel conforme aumentan los años”.

Nieto aclara que si el trabajo fue hecho por un experto, la tinta llega hasta la dermis (la segunda capa de la piel), justo hasta donde actúa el láser. "Si hay queloides (cicatriz) no se recomienda el láser porque puede exacerbarse más la lesión y hacerse más grande".

Dependiendo del tamaño y los colores usados en el tatuaje, el costo de cada sesión fluctúa entre 400 a 600 soles.

Mejor uno temporal

A la luz de todo el engorroso procedimiento detallado líneas arriba, quizá sea mejor evaluar la posibilidad de un tatuaje temporal.

Alejandro Gonzales Jáuregui, tatuador y diseñador, destaca que puede plasmar en piel cualquier diseño -con o sin sombra-, retratos, caligrafías, y más. Trabajos que realiza con un tipo de tinta empleado en los efectos especiales del cine. "La traemos de Orlando (EE.UU.) y es 100 % segura, básicamente se usa para cuestiones decorativas, pero tenemos una gran cantidad de clientes que la usan para cubrir cicatrices, operaciones al corazón, alguna fractura expuesta, heridas y quemaduras".

Esta tinta es en base a alcohol, resistente al agua, y el tiempo de duración es de 5 a 10 días. "Hay ciertas zonas del cuerpo, como los antebrazos y las piernas, en donde puede durar hasta un mes, pero eso depende del cuidado que se tiene. En el cuello dura menos, porque ahí hay pliegues, más sudor y roce con la ropa".

Un tatuaje temporal ocupa únicamente la capa más superficial de la piel, y los dermatólogos no aconsejan que se mantenga por más de un mes, de lo contrario se estarían tapando los poros, que ayudan a eliminar la transpiración.
                                                                                                                 
Este trabajo no debe hacerse en zonas cercanas a las mucosas, los ojos y los genitales. Fuera de esas restricciones, los tatuajes provisionales pueden aplicarse en niños, y el costo fluctúa ente los 15 y 150 soles, mucho menos que un diseño en tinta permanente.

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