El uso de fuentes de energía como el gas natural, el sol y el viento puede hacer un gran cambio en la calidad del aire dentro de nuestro hogar.
Unas 3.000 millones de personas en el mundo aún cocinan y calientan sus hogares con combustibles de biomasa (restos orgánicos) y carbón, según la Organización Mundial de la Salud. El problema de contaminación que provoca esta práctica tiene consecuencias fatales: alrededor de 4 mil millones de personas mueren prematuramente por enfermedades cardiacas y respiratorias, las que son atribuibles a la exposición al aire contaminado de interiores.
Entonces, ¿esta es la única fuente contaminante dentro del hogar? Pues no. Hay que recordar que la energía es el principal contribuyente al cambio climático, de acuerdo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y examinar si en nuestras casas hacemos un buen uso de esta. Sin embargo, hay algo más en lo que hay que detenernos: las fuentes de energía que utilizamos.
Aunque el uso del sistema de gas natural se ha hecho masivo, aún nos proveemos con fuentes derivadas del petróleo, muchas veces porque creemos que el cambio a un sistema más limpio será de uso restringido. De acuerdo a Cálidda, la empresa peruana que distribuye gas natural, señala que se puede hacer uso de esta fuente de energía para la cocina, la terma, la secadora de ropa y los sistemas de calefacción.
Otras opciones que se usan cada vez más son las provenientes del sol y el viento. La instalación de paneles solares aún en zonas nubladas como las de Lima puede ser una inversión inteligente, ya que es una fuente inagotable. También han aparecido las turbinas eólicas domésticas, que aprovechan las corrientes de viento de la ciudad. Según la empresa General Electric, hay un gran potencial eólico en el Perú y existen 57.257 megavatios de energía de este tipo sin aprovechar.
Por último, para conservar un aire sano dentro del hogar hay otras acciones que puedes realizar. Por ejemplo, en un estudio realizado por la NASA realizado en 1989 y que hace un par de años fue actualizado, se determinó que hay cinco plantas de interiores que pueden ayudar a purificar el aire: Potus (Epipremnum aureum); Espatifilo o flor de la paz (Spathiphyllum sp.); Palmera de bambú (Raphis excelsa); Lengua de tigre o sansevierias (Sansevieria trifasciata); y el árbol del caucho (Ficus robusta).
Anímate a cambiar la calidad de aire dentro de tu hogar y apoyar también al estado de aire que todos compartimos.
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