La contaminación en el Perú no ha sido ajena a los investigadores peruanos. Mónica Abarca y Marino Morikawa son algunos profesionales que buscan mejorar esta situación.
¿Cómo revertir de forma económica los efectos en el aire de 150 años de industrialización? Esa fue la pregunta que hace cuatro años impulsó a Mónica Abarca, en ese entonces estudiante de Ingeniería Mecatrónica de la PUCP, a pensar en una solución de gran impacto para solucionar este tipo de contaminación. Así fue como nació Qaira, un dron construido por ella y un equipo de ingenieros con el que se buscaba monitorear el estado del aire y advertir de peligros sobre todo en zonas del Perú donde la actividad extractiva era más intensa.
Mónica es parte de la generación de jóvenes ingenieros que han enfocado sus esfuerzos en la solución de la contaminación ambiental. El caso de Mónica es digno de orgullo peruano ya que gracias a este proyecto, que se convirtió en una empresa start-up, pudo conseguir apoyos de Concytec y Ciencia Activa, dos espacios científicos peruanos, así como de SeedStar, una incubadora internacional que le permitió ir a Suiza y mejorar el prototipo.
Es en esta etapa en la que conoce a otro guardián del ambiente, Marino Morikawa. Marino, científico especializado en tecnología ambiental en Japón, tenía ya una trayectoria en trabajos de descontaminación al haber recuperado el humedal El Cascajo en Huaral con nanotécnicas. Juntos pensaron en unir esfuerzos y crear Qaira Nano+7, con el que no solo monitorearán sino limpiarán el aire a través de iones que condensan las partículas contaminadas y las disuelven de forma más fácil. El proyecto fue elegido como la mejor empresa start-up peruana el año pasado y aún sigue recaudando fondos para implementarse.
Mientras tanto, las labores para salvar el aire no cesan. Mónica y su equipo inicial han empezado a crear un mapa de la contaminación del aire con el que determinarán también la dirección de los gases contaminantes para saber quiénes son los más afectados. Además, Mónica sigue recibiendo reconocimientos como el obtenido en abril pasado como la mejor emprendedora en la Cumbre SeedStar 2017 en Suiza. Todos estos logros nos dan esperanzas de tener un mejor aire en el Perú.
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