Cinco reglas para combinar corbata, camisa y traje

Aprender a combinar correctamente una corbata, una camisa y un traje para un evento especial no es tan complicado como parece, solo hace falta seguir algunas reglas básicas. Aquí cinco consejos que te facilitarán la elección de las prendas:

Escoge el traje primero. Si no tienes idea de que con qué combinarás una camisa no deberías comprarla. Primero elige el traje, ponlo sobre la cama, después elige la camisa y ponla debajo del saco. Con este ejercicio podrás variar estilos y colores hasta encontrar la combinación correcta.

La camisa estampada va con corbata lisa. Si tienes un terno estampado con rayas o cuadros, no te olvides de utilizar una corbata lisa, de un solo color.

Pon atención en el contraste y la armonía. Combinar consiste en encontrar la armonía de las prendas buscando un punto medio. Si tienes la piel clara, te irán mejor las camisas en tonos azules, si por el contrario, tu piel es más rosada, los verdes te irán mejor. Para todos aquellos que tienen tez oscura existe una gama más amplia de colores.

Estampado grande con estampado pequeño. Si por optas, por ejemplo, por un traje de un solo color, como azul oscuro o negro, escoge una camisa de rayas finas en azul o blanco que le den un toque original a la combinación.

Con esto, no olvides llevar una corbata de un solo color, pero, si optas finalmente por una estampada, procura que ésta tenga las rayas más anchas que las de la camisa.

Conoce las combinaciones básicas. Una corbata negra, por ejemplo, combina con un traje negro y una camisa blanca. Recuerda, jamás con una camisa negra. En el caso de una corbata rosada, queda perfecta con una camisa blanca o celeste y un traje gris. Por otra parte, una corbata roja va bien con una camisa blanca, azul o celeste. La azul armoniza con una camisa azul del mismo tono o uno más claro. Y la verde, si quieres optar por un estilo más atrevido, destacará con camisas blancas, negras o verdes de tonos más claros.