Esta semana se cumplen 20 años desde la publicación del texto final de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación (CVR). Este texto buscó interpretar los hechos acontecidos durante los años 80-90 tras el surgimiento de los grupos terroristas Sendero Luminoso y MRTA en el Perú. Dentro del sector de la ciudadania mas politizado, esta publicación fue determinante, y generó un amplio debate sobre su pertinencia, su neutralidad, y su impacto en la interpretación sobre los años de violencia relacionados al terrorismo. Sin embargo, una reciente encuesta de IEP, nos muestra la distancia que existe entre este sector politizado y la opinión pública en general: un 62% no conoce ni ha escuchado hablar acerca de la Comisión de la Verdad. Este desconocimiento es mayor en las mujeres (68%), en el segmento más pobre de la sociedad, es decir los NSE D y E (71%); y en los menores de 25 años (¡85%!).
La última cifra permite iniciar la reflexión acerca de cuál ha sido el rol de la CVR en la construcción de la memoria histórica de la época del terrorismo. El efecto directo de construcción opinión pública de la CVR ha venido reduciéndose entre las generaciones más jóvenes. Esto no niega que exista el impacto indirecto mediante influencia sobre líderes de opinión, académicos e intelectuales, pero sí puede ser indicio de una importancia decreciente en los más jóvenes sobre el terrorismo vivido en el Perú.
IEP muestra además el posicionamiento de ese 38% que sí ha escuchado de la CVR. La encuesta señala que el grupo más importante es un 42% que considera que la labor de la Comisión de la Verdad fue negativa, y un minoritario 26% lo considera positivo. Es decir, sólo 9.9% de peruanos consideraría positiva la labor de la Comisión de la Verdad. La valoración de la CVR es más negativa entre quienes han tenido un mayor grado de experiencia directa respecto a la violencia, es decir los mayores, en los sectores NSE D y E; y sorprendentemente en los que según IEP se consideran de izquierda. Estos resultados nos señalan que existen mecanismos de construcción de memoria histórica que han sido paralelos a los círculos académicos en los que la CVR recibe una mejor valorización, y que su contra-narrativa ha sido más exitosa de cara a la opinión pública.
Si revisamos el conocimiento y la postura de la población con respecto a la CVR, esta ha venido variando. Esto es percibible si generamos una trayectoria con los resultados de diversas encuestas referidas a la CVR. Si bien la formulación de las preguntas no ha sido la misma a lo largo del tiempo si es posible construir una tendencia respecto a porcentaje de la ciudadanía con una visión positiva de la CVR. En Julio del 2003, cuando todavía no se había presentado el informe de la CVR, había estudios que mostraban opiniones divididas respecto al trabajo de la Comisión (41% de aprobación vs 38% de desaprobación según una encuesta de la Universidad de Lima). 10 años después (2013) el grado de conocimiento respecto al trabajo de la CVR ya aparecía como minoritario (34% según IPSOS). Si bien una mayoría de quienes decían conocer el trabajo de la CVR la apoyaban, también se dio que una mayoría lo consideraba como sesgado.
La última encuesta de IEP confirma esta tendencia hacia un mayor desconocimiento y un posicionamiento negativo hacia la CVR. Según otra encuesta de IPSOS, encargada por Lampadia, un 32% considera que las “Diferentes interpretaciones sobre el terrorismo” es un punto que genera desunión entre los peruanos. La visión que tenemos acerca de los años de terrorismo siguen causando división entre los peruanos y la evidencia nos indica que el impacto que tuvo la CVR en reducirla fue limitado.
Comparte esta noticia