El escritor Fernando Vallejo descarga toda su sinceridad en entrevista concedida a La Tercera de Chile a propósito de su nuevo libro "¡Llegaron!". Además, critica a Paz, García Márquez y hasta al papa.
La mayoría de escritores poseen la virtud de la sinceridad, pero muy pocos son tan brutalmente transparentes como lo es Fernando Vallejo, el escritor colombiano que acaba de publicar su última novela “¡Llegaron!”.
En una entrevista concedida al diario La Tercera de Chile, Vallejo responde a preguntas ligadas a pasajes de su última obra de carácter autobiográfico, como por ejemplo, a qué se refiere cuando dice que: los pobres nos odian a los ricos por más bien que les hagamos.
El escritor responde: “Para referirme a ellos en concreto, me indigna el lugar común de equipararlos a la bondad. Los pobres son una horda paridora, irresponsable y zángana. Estoy harto de izquierdistas y demagogias”.
Del mismo modo, critica al poeta mexicano Octavio Paz, a su compatriota Gabriel García Márquez (de quien en realidad siempre fue crítico) y hasta al papa Francisco.
“Eran muy mezquinos ambos (Paz y García Márquez). El primero, un prosista menor y un pésimo poeta, podrido de envidia. Y el segundo, el primer cortesano de Fidel Castro y un novelista sin originalidad, contra lo que se dice. Para empezar, escribía novelas de narrador omnisciente, de tercera persona, el camino más trillado de la literatura, llamando a sus personajes con nombre y apellido como Rulfo, hablando de sueños dentro de sueños como Borges, etcétera. ¿Y qué es eso de que en Macondo las cosas eran tan recientes que había que señalarlas con el dedo?”.
“Ese (el papa Francisco) es uno que no quema gente en la hoguera, al estilo de la Santa Inquisición, porque no puede. En los tiempos que corren no le queda más que dárselas de pobre y bondadoso. ¿Qué ha hecho para reformar su empresa, la Iglesia de Roma, en los tres años que lleva de pontificado? Todo tiempo pasado fue menos malo”, concluye el autor de “La puta de Babilonia”.
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