Entre las fotos que se exhiben en la muestra una de las más brillantes es la Huaca Cortada revelada en negativo.
Luego del gran éxito que tuvo con la presentación de su libro fotográfico “Lords, Pyramids and Replicas” Mario Silva, artista peruano regresa a nuestro país y presenta extractos de sus fotografías de iconos mochicas en la muestra “Decenter: Souvenir” que se lleva a cabo en la sala de exposiciones Coricancha del convento Santo Domingo en el Cusco.
En esta oportunidad, el peruano entrega una reinterpretación de la iconografía Precolombina en el presente, pero no solo eso ya que también demuestra que los Significados pueden transformarse a través de los años, esto con respecto a las tiendas de souvenir que existen en la ciudad imperial y en todo nuestro país que ofrecen diversos objetos que demuestran y grafican la historia de nuestros antepasados.
Mario Silva manifiesta que los iconos tienen vida propia y que en nuestros tiempos son ellos los que buscan reinventarse con lo cual encuentran una forma de perdurar en el tiempo; en las fotos creadas por el artista los iconos convertidos en plástico logran transformarse en imágenes contemporáneas.
“El plástico me permite crear siluetas que representan un espacio neutral con cierta potencialidad” manifiesta Silva, explicando así que para la creación de la muestra el escogió este material por que representa nuestro tiempo, material que dura en el tiempo y tiene el mismo valor que una cerámica precolombina, porque cree que en el futuro encontraremos piezas de plástico que revelaran importante información sobre nuestro tiempo histórico.
Entre las fotos que se exhiben en la muestra una de las más brillantes es la Huaca Cortada revelada en negativo, con esto Mario Silva transforma un espacio con connotaciones negativas en un espacio positivo, cancelando el acto de violencia el espacio tiene la oportunidad de reinventarse.
En la exhibición que se desarrollara hasta el 30 de noviembre en la sala de exposiciones Coricancha en el Cusco, se puede apreciar una gran variedad de imágenes en medio formato y dos instalaciones, versiones épicas, tridimensionales, de la propuesta visual, donde también cumplen un rol la modelo peruana Claudia Oliveira que luce un vestuario de reminiscencias moches creado por la diseñadoras Mozhdeh Matin, quienes acompañan al artista peruano Mario Silva y así demuestran que la interpretación de los iconos en nuestro tiempo también se puede ver a través de la moda que le da un espacio sumamente extenso para que se reinventen a pesar del tiempo.
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