El estudio se encargó a la firma Simpson Thacher & Bartlett, que analizó 250 mil documentos de 6 proyectos en los que la peruana participó junto a Odebrecht.
La constructora Graña y Montero informó que una auditoría interna ordenada por ellos mismos ha concluido que no no existen evidencias de actos de corrupción en seis proyectos de infraestructura en los que la peruana participó junto a Odebrecht.
Están limpios. La investigación que inició en enero de este año, se encargó a la firma de abogados estadounidense Simpson Thacher & Bartlett para determinar si existieron probables actos de corrupción en su asociación con Odebrecht.
La indagación se centró en seis proyectos de infraestructura en los que Graña y Montero participó junto a la constructora brasilera, como la Línea 1 del Metro de Lima, la Carretera Interoceánica, proyecto de Irrigación Chavimochic y el Gasoducto Sur Peruano.
“El informe recibido hoy deja claro que no se han encontrado evidencias de corrupción y al mismo tiempo nos confirma que hay áreas de mejora, particularmente, en la manera en que gestionamos nuestras asociaciones con terceros. Por eso hemos pedido al Comité de Riesgos, Cumplimiento y Sostenibilidad que trabaje en reforzar la política de entrada en consorcios, con especial atención a los proyectos en los que tengamos una participación minoritaria, como son los 6 casos analizados”, señaló Augusto Baertl, presidente del Directorio de G&M.
“Tras completar más de 6 meses de trabajo, la investigación ha finalizado sin que se haya identificado evidencias que lleven a concluir que alguno de los directores, presentes o pasados, ejecutivos o empleados de la compañía, hayan tenido conocimiento o participado en algún acto de corrupción o soborno a funcionarios públicos en los referidos proyectos”, refiere el documento.
Los resultados fueron presentados ante la Junta de Accionistas de Graña y Montero. En total se examinaron unos 250,000 documentos de seis proyectos en que participó la constructora peruana en sociedad con Odebrecht.
Cedieron dinero. La auditoría interna señala además que sí hubo acuerdos de distribución de dividendos entre ambas compañías y que un total de S/45 millones aparecen en la contabilidad de la empresa como parte de los dividendos por las carreteras IIRSA Sur (tramos 1 y 2) y la Línea 1 del Metro.
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