La crisis que experimentó la actriz durante su batalla preventiva contra el cáncer de seno le hizo constatar que Pitt es el mejor compañero de vida que podría desear.
Angelina Jolie y Brad Pitt no han disfrutado precisamente el mejor año de su vida. La mastectomía a la que se sometió la actriz tras descubrir que era propensa a contraer cáncer, tuvo a toda la familia con estrés y nerviosismo.
Sin embargo, una vez superado ese trago amargo, Jolie ahora sabe que la presencia de Pitt en su vida es imprescindible, ya que le proporcionó un apoyo incondicional que jugó un papel fundamental en su recuperación y que ahora ha sellado “para siempre” su historia de amor.
“Este tipo de situaciones dramáticas te ponen a prueba y te someten a una gran presión anímica. Muchas parejas han sucumbido ante el impacto emocional de una crisis de estas características, pero ese no es el caso de Brad y Angelina”, dijo una fuente cercana a la revista "OK!".
El informante señaló que aunque la actriz suele volverse distante cuando tiene que afrontar diversos problemas, el proceso de recuperación le ha ayudado a reforzar el amor que siente por su pareja. Brad no se separó de ella en los momentos en los que se sentía más vulnerable.
"Tras el éxito de su operación, Angelina se ha sentido bendecida y como una princesa con todas las atenciones que le han dedicado en casa. Sus hijos se ofrecen a preparar el desayuno, a colaborar en las tareas domésticas, y no paran de recordarle que debe tomar la medicación. Brad simplemente le hace ser la mujer más feliz del mundo", explicó el mismo informante, publicó el portal de Quién.
Comparte esta noticia