El protagonista de ´La piel que habito´ dice que en los últimos años ha escogido proyectos en función al trabajo de gente ´que realmente es buena en lo que hace´.
El actor español Antonio Banderas, en la Berlinale de la mano de la película "Haywire" de Steven Soderbegh, aseguró hoy que en los últimos años escoge los proyectos en los que trabajar en función de "nombres" y de gente a la que admira.
"En los últimos tres o cuatro años baso mis decisiones en nombres, en gente con la que estoy muy interesado en trabajar, gente que me atrae, que realmente admiro", aunque también tiene en cuenta el guión o sus compañeros de reparto, declaró el artista en conversación con un grupo reducido de medios, entre los que se encontraba Efe.
"Dejé de hacer películas específicas y me fui con Woody (Allen), con Steven (Soderbergh), con (Pedro) Almodóvar y ahora voy con Carlos Saura. Trabajar con gente que realmente es buena en lo que hace es el punto principal", agregó, para admitir también su fascinación por Almodóvar.
"A veces hay rodajes que son muy incómodos, pero los resultados son muy gratificantes. Almodóvar, por ejemplo, no es fácil. Almodóvar es muy difícil, porque es muy exigente, muy preciso en sus instrucciones, te da una tremenda cantidad de información que tienes que procesar", explicó.
El actor afirmó que no hace películas como quien acude a una fiesta, porque "ése no es el punto".
"Yo disfruto cuando alguien te está retando, y Pedro siempre lo hizo, en los 80 y ahora otra vez, 22 años después. Eso es muy gratificante y es lo que busco", señaló en relación al personaje "minimalista" y "enigmático en su monstruosidad" que interpreta en "La piel que habito" ("The Skin I Live in").
Este último trabajo con el cineasta español ha sido para Banderas "una confirmación de la genialidad" de Almodóvar y de lo "increíble" que es todo lo que hace el realizador.
"En ese aspecto, el tiempo es el mejor amigo de Pedro, porque sus películas tienes que ser metabolizadas", afirmó.
EFE
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