El actor tuvo tres esposas, fue un ícono de la pantalla grande en la década de los 80's y se reinventó como el desenfadado Charlie Harper de la televisión estadounidense. Hoy en día vuelve al ojo de la noticia con una confesión devastadora, es portador del VIH.
La estrella de Hollywood Charlie Sheen reveló esta mañana en una emotiva entrevista con Matt Laur del programa "Today" que es portador del VIH. Nacido un 3 de setiembre de 1965, este actor tiene por nombre de cuna Carlos Irwin Estevez.
Fue recién en la década de los 80's que Charlie inició una carrera meteórica que le hizo una figura buscada por los productores de cine hollywoodense que vieron en él una figura masculina ideal para los roles protagónicos jóvenes. Si no vale hacer un recuento por algunos de sus 'blockbusters': Wall Street (1987), Arma joven (1988), Una mujer en la liga (1989) o Hot shot! (1991), todas ellas cintas que mostraban la faceta de un Charlie Sheen más cercano a la realidad que a la ficción, con una vida plagada de escabrosos escollos en los que el alcohol y las drogas hacían su aparición.
Con amigos de la denominada "Brat pack", como el actor Rob Lowe y el ganador del Óscar Sean Penn, Charlie, se codeó con los grandes directores, entre ellos Oliver Stone de quien se volvió íntimo amigo. Al menos hasta que perdió el papel protagónico de "Nacido el 4 de julio" frente a un joven Tom Cruise.
Sus problemas personales llegaron a caudales a los medios amarillistas estadounidenses y su brillo profesional fue opacado por su relación con Heidi Fleiss, una empresaria sexual de renombre en Hollywood, además de sus problemas con las drogas.
Sería recién en el 2000 que su ingreso a la TV reemplazando a Michael J. Fox en la serie "Spin City" le volvería a la gloria y le abriría las puertas a una nueva industria.
Así llegaría la comedia a sus manos con un rol protagónico en "Two and a half man", un sitcom que le convirtió en el actor mejor pagado de la televisión estadounidense, con más de un millón de dólares por episodio en la séptima temporada.
La noticia no llega con cola corta pues aunque se desconoce el monto real de su fortuna, en la entrevista con Matt Lauer, el actor ha asegurado con tristeza, quizás, que la revelación la ofrece para evitar continuar con los chantajes.
Ahora solo le queda esperar y rezar porque las demandas contra su persona no lleguen por montones y logre levantarse con nuevos proyectos en el cine o la televisión.
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