A las 8 de la noche del miércoles las luces de las marquesinas bajarán su intensidad para llorar la muerte del actor.
Las luces de Broadway bajarán su intensidad este miércoles para llorar la inesperada muerte del actor James Gandolfini, quien fue célebre sobre todo por su papel de Tony Soprano en televisión y dejó una parte de su legado en los teatros de Nueva York e incluso estuvo nominado a un Tony, se informó hoy.
A las 8 de la noche hora local (12:00 GMT), la arteria teatral de Manhattan, Broadway, estará inusualmente tenue este miércoles, pues las marquesinas de sus teatros llorarán a uno de sus hijos adoptivos.
Un día antes de su funeral y una semana después de su muerte, James Gandolfini será recordado en el lugar donde triunfó gracias a "Un dios salvaje", de Yasmina Reza, que ganó el premio Tony en 2009 a la mejor obra dramática y reportó al actor su única nominación al máximo galardón del teatro en Estados Unidos.
Gandolfini "fue un actor consumado que aportó individualidad a cada papel e inspiró una conexión auténtica con el público. Fuera en la pantalla o en los escenarios de Broadway, hizo cada papel creíble y aparentemente sin esfuerzo", manifestó la directora ejecutiva de la Broadway League, Charlotte St. Martin, en un comunicado.
La oronda figura de Gandolfini destacó sobre los escenarios teatrales gracias al incisivo análisis de las miserias adultas que Reza realizaba en "Un dios salvaje", en la que compartió escenario con Jeff Bridges, Marcia Gay Harden y Hope Davis, años antes de que Roman Polanski realizara la adaptación cinematográfica.
Su debut en Broadway se había producido 17 años antes con un papel secundario en la obra de Tennessee Wiliams "Un tranvía llamado deseo", en la que compartió escenario con Jessica Lange y Alec Baldwin, y también apareció en "On the Waterfront", en 1995.
Irónicamente, el preestreno ante la prensa de esa obra (adaptación teatral del filme "La ley del silencio" y uno de los grandes fracasos de su temporada) estuvo teñido por la tragedia cuando uno de sus actores, Jerry Grayson, sufrió un ataque de corazón sobre el escenario, la misma causa de la repentina muerte de Gandolfini, a los 51 años la semana pasada en Italia.
"Nuestros pensamientos están con su familia y sus amigos, y también con todos los seguidores que sintieron como si los conocieran a los personajes que él interpretó", concluyó el comunicado de la Broadway League.
EFE
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