La hija que tuvo con Katie Holmes ahora acude a un colegio católico en Nueva York.
Días después de que la prensa estadounidense afirmara que Tom Cruise llevaba cien días sin ver a su hija Suri, el actor se defendió públicamente asegurando que no ha “abandonado” a la pequeña.
En unas declaraciones publicadas por la revista “People”, Cruise explicó que las cosas cambiaron mucho desde el divorcio, tanto es así que Suri ya no practica la cienciología, religión de la que su padre es uno de sus embajadores.
Si bien es cierto que Tom lleva más de tres meses sin visitar a su pequeña, de siete años, él aseguró que la llama por teléfono todos los días y que se perdió su primer día de colegio porque nadie le pidió que viajara hasta Nueva York.
“Si me hubieran pedido que estuviera allí, habría estado”, aseguró el actor, quien alude a una falta de entendimiento con su ex, Katie Holmes, como el problema para visitar a su hija.
“Las cosas han cambiado y tenemos que llegar a acuerdos, como en todo divorcio, tenemos que trabajar en los turnos de visita”, explicó. “Son solo un cúmulo de circunstancias (lo que le ha impedido ver a Suri), no es que la haya abandonado”, se justificaba.
Cuando Katie Holmes anunció su separación de Tom Cruise la noticia pilló por sorpresa incluso al actor, que aseguró que no se lo esperaba. Holmes entonces puso tierra de por medio y se mudó junto a su pequeña desde Hollywood hasta Nueva York, informó abc.es.
En la ciudad de los rascacielos la actriz se ha centrado en su carrera como diseñadora y ha conseguido su objetivo: alejar a Suri de la cienciología.
Y es que, según se afirmó tras el divorcio, el principal motivo para separarse fue que Holmes no quería que su hija se involucrara más en la religión que practica Cruise.
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