El entrenador del Real Madrid asegura que enfrentar al CSKA será una dura prueba para sus dirigidos, por lo que mandará su mejor once al choque de octavos de final.
Jose Mourinho sabe lo complicado y competitivo que se ha tornado el fútbol ruso, además del crudo invierno que padeceran sus dirigidos cuando pisen el campo del estadio Luzhniki.
"El CSKA es un adversario difícil, que hay que respetar. El partido es demasiado importante y complicado como para reservar jugadores", dijo Mourinho en rueda de prensa.
El portugués destacó que el equipo del Ejército ruso "no ha cambiado mucho" desde que se enfrentó a él cuando dirigía al Chelsea hace ocho temporadas.
"Muchos jugadores son los mismos: Ignashévich, Aldonin, Sémberas, los hermanos Berezutsky. Esa estabilidad es una ventaja muy grande para un equipo. Siempre se clasifican para la Champions y muchas veces para la fase de eliminatorias", añadió.
"Mou" reconoció algunas nuevas figuras del CSKA, que acaba de perder al delantero brasileño Vágner Love al Flamengo, pero ahora tienen a (delantero marfileño) Doumbia y (al nigeriano) Musa.
"El CSKA es tácticamente y físicamente fuerte, y está perfectamente adaptado a las condiciones climatológicas. Son muy ordenados y es difícil meterles goles. Cuando entrenaba al Inter les ganamos en los cuartos de final por 1-0 tanto en Milán como en Moscú. Fue difícil", precisó.
A su vez, el técnico luso subrayó que sus futbolistas deben ser más fuertes que el frío y el césped artificial: "No es lo mismo jugar en hierba natural que artificial, con quince grados bajo cero , pero la mentalidad y ambición de los futbolistas debe ser más fuerte que las condiciones adversas".
Mourinho aseguró que elegirá un once inicial de acuerdo con las características del adversario.
"La eliminatoria se gana en dos partidos. Tenemos un grupo en el que las diferencias entre los jugadores del mismo puesto con de características y no de calidad", apuntó, en alusión a si jugarán de inicio Kaká y Ozil en el centro del campo.
EFE
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