Decenas de aficionados se enfrentaron a las fuerzas de seguridad y arrasaron con todo lo que encontraron a su paso en la plaza de la Torre Eiffel.
La celebración del primer título liguero del París Saint-Germain en los últimos diecinueve años quedó empañada por los incidentes que provocaron algunos barra brava durante la fiesta frente a la Torre Eiffel, donde los jugadores pretendían mostrar el trofeo a los aficionados.
Apenas cinco minutos duró la que debía ser una jornada festiva tras lograr el tercer título de la historia del club parisino, cuyos dueños cataríes aspiran a convertir en un grande de Europa.
Fue el tiempo que pudieron estar los jugadores, con el capitán Thiago Silva a la cabeza, festejando el título con su hinchada antes de que las bengalas y el comportamiento violento de los hinchas más violentos aguasen la fiesta.
El equipo llegó con una hora de retraso a la plaza de Trocadero, prominente vista sobre la Torre Eiffel donde Zlatan Ibrahimovic, Javier Pastore, David Beckham y compañía debían celebrar matemáticamente el título, tras derrotar ayer en la jornada 26 de liga al Lyon por 1-0.
Para entonces, algunos hinchas bravos que habían llegado una hora antes se habían enfrentado a los antidisturbios, arrancado vallas y lanzado bengalas.
La celebración se complicaba cada vez más y algunos aficionados con el rostro tapado escalaron una torre de andamios cercana, hasta que se decidió finalizar rápidamente la aparición de los jugadores y a suspender el posterior crucero por el Sena del equipo por "motivos de seguridad".
Algunas decenas de aficionados se enfrentaron entonces a las fuerzas de seguridad y arrasaron con todo lo que encontraron a su paso en la plaza.
EFE
Comparte esta noticia