Activistas del Maidán se niegan a abandonar el centro de Kiev

Los activistas del Maidán ucraniano, como se conoce el movimiento de protesta que derrocó a Víktor Yanukóvich, anunciaron hoy que no abandonarán la plaza de la Independencia de Kiev hasta que no su cumplan todas sus exigencias.

"El Maidán no se irá hasta que no se cumplan todas sus exigencias: castigo a los criminales, renovación del poder, reforma del sistema del poder, regulación constitucional de las comunidades, creación de la comunidad territorial de Kiev con autogobierno", señala el llamado Manifiesto de las Comunidades del Maidán.

Los activistas, instalados desde hace medio año en una ciudadela de tiendas de campaña, rechazaron así la petición del recién elegido alcalde de Kiev, el excampeón de boxeo Vitali Klitschkó, que en una de sus primeras declaraciones después de los comicios pidió desmontar las barricadas en el centro de la capital.

"Estoy seguro de que a día de hoy las barricadas ya han cumplido su función y deber ser desmanteladas. Kiev debe volver poco a poco a una vida normal y concentrar sus esfuerzos en las reformas, para que éstas se puedan afrontar con la mayor celeridad", dijo el futuro regidor de la ciudad.

Las organizaciones agrupadas en el movimiento popular del Maidán aceptaron reducir el espacio que ocupa su ciudadela a los límites de la plaza de Independencia y desalojar las calles adyacentes, entre ellas la Kreschatik, principal vía de la ciudad.

Los activistas también respondieron a la petición de Klitschkó para que las llamadas autodefensas del Maidán abandonen el Ayuntamiento de Kiev -tomado al igual que la plaza desde hace más de medio año- y plantearon la necesidad de un debate públicos sobre los usos que deberían darse al edificio, situado en la calle Kreschatik.

Las organizaciones también proponen que la Casa de los Sindicatos -situada en la misma plaza de la Independencia, incendiada y quemada por los activistas más radicales del Maidán durante los violentos disturbios del pasado mes de febrero- se reconstruya para ser reconvertida en un centro cívico.

EFE