Los responsables de la red captaban tanto chicas como chicos y ofrecían sus "servicios" de prostitución a través de Internet, tanto en la capital como en otras ciudades de Brasil.
La policía desbarató hoy una red de prostitución que operaba en Brasilia y detuvo a nueve acusados de dirigirla, entre quienes figura Jeany Mary Corner, conocida como la "madame de los políticos", informaron fuentes oficiales.
Según las autoridades, los responsables de la red captaban tanto chicas como chicos en todo el país y ofrecían sus "servicios" de prostitución a través de Internet, tanto en la capital como en otras ciudades de Brasil.
Jeany Mary Corner, de 53 años, regentaba una agencia de modelos en Brasilia hasta 2005, cuando su nombre fue vinculado a un sonoro escándalo de corrupción que acabó por derrumbar al entonces ministro brasileño de Hacienda, Antonio Palocci.
El ministro, uno de los más poderosos del gabinete del entonces presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, se vio obligado a dimitir tras ser acusado de frecuentar bacanales en una mansión de Brasilia, a los que asistían empresarios que buscaban favores del Gobierno.
A esas fiestas, según se aseguró en su momento, eran llevadas muchas de las "modelos" de la agencia de Corner, quien fue citada como "madame de políticos" en la prensa y hasta en una comisión del Congreso que investigó las denuncias contra Palocci.
Hace ocho años, en una inusual entrevista con el diario Folha de Sao Paulo, Corner negó que las chicas que trabajaban con ella fueran prostitutas y aseguró que su empresa se sólo dedicaba a "organizar eventos".
Corner sí admitió que organizaba fiestas para políticos, incluso del aún hoy gobernante Partido de los Trabajadores (PT), y que para alguna de esas ocasiones llegaron a reservar y cerrar hasta dos pisos de un hotel en Brasilia.
En aquella entrevista, Corner aseguró que tenía alrededor de un millar de clientes y que entre ellos había influyentes políticos, cuyos nombres guardaba en una agenda infantil, que en la portada tenía un dibujo del personaje "La sirenita", de Walt Disney.
Aunque mostró su agenda en la entrevista, también garantizó que su contenido "nunca" sería revelado. "No soy delatora", declaró en esa ocasión al diario paulista.
Amigos de Corner citados en aquella vez por Folha de Sao Paulo dijeron entonces que "si ella abriera la boca, no haría caer al Gobierno pero causaría al menos cien divorcios".
EFE
Comparte esta noticia