Los más afectados por el desastre natural fueron las decenas de familias que perdieron sus hogares, otro ciento de personas tuvieron que evacuar y otro ciento resultaron heridos.
La tormenta de aire y granizo que azotó las provincias de Módena y Bolonia, en la región italiana de Emilia Romagna, obligó la evacuación de más de cien personas y dejó cientos de heridos.
Las personas que resultaron heridas sufrieron golpes de objetos llevados por el aire o se vieron afectadas por la rotura de cristales debido a la fuerte granizada.
Se trata de una de las tormentas de aire más violentas de los últimos diez años, incluso en esta ocasión se formó un tornado que golpeó con fuerza a cientos de casas y edificios.
Comparte esta noticia