Prueba de luminol permitió a la Policía hallar restos de sangre en el segundo piso, en el pasadizo y la escalera de la casa, ambientes donde no se produjo el crimen.
El asesinato de la empresaria Violeta Esmeralda Quiroz de Gibu (59), degollada el jueves último, no termina de esclarecerse y la Policía busca al homicida entre el entorno familiar de la víctima, más ahora que halló rastros de sangre en ambientes de la casa, donde no se produjo el crimen.
Esto se determinó tras la prueba de luminol, sustancia química que permite encontrar restos de sangre aún si estos son limpiados. Hallaron evidencias en el segundo piso, en el pasadizo y la escalera.
"Esto nos permite corroborar que alguien del entorno de la víctima trató de borrar las evidencias", dijo un agente según refiere el diario El Comercio.
"Esto es sospechoso, pues supuestamente todo sucedió en el primer nivel del inmueble ¿Cómo entonces aparece sangre en el segundo piso? Las investigaciones determinarán lo que realmente ocurrió", señaló una fuente policial al diario Ojo.
También se halló rastros de sangre en las manos y las sandalias de Leslie Quiroz Ramírez, sobrina de la empresaria asesinada, y quien encontró el cuerpo, en la sala de la vivienda ubicada en la avenida Petirrojo 255, en San Isidro.
El esposo de la fallecida, Alfredo Gibu Gibu también ha despertado interés en la investigación policial, por la frialdad con que asumió la noticia, precisa Ojo.
"Es un señor muy serio, esta tranquilo, calmado, su comportamiento era muy extraño", afirmó un efectivo al rotativo.
Alfredo Gigu y a Alex Gibu, esposo e hijo de la asesinada empresaria, rendirán su manifestación mañana lunes en la División de Homicidios de la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri).
Asimismo, han sido citados los hermanos Alberto y Delibia Aspajo Shupingahua, ex empleados de la familia, quienes fueron denunciados en el 2010 por el robo sistemático de 10 mil soles y de objetos de valor.
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