Grupo opositor informó del hallazgo de 45 cadáveres, en su mayoría de mujeres y niños, en el barrio de Karm el Zaitun, en Homs.
Un total de 45 cadáveres, en su mayoría de mujeres y niños, fue encontrado en el barrio de Karm el Zaitun, en la ciudad central de Homs, informó el grupo opositor Comités de Coordinación Local en Siria.
Según un comunicado de los Comités, los cadáveres son víctimas de una nueva matanza cometida por el régimen sirio, y con ellos se eleva hasta 108 la cifra de muertos registrados en las últimas 24 horas.
Sin embargo, las autoridades sirias, a través de la agencia oficial de noticias Sana, aseguraron que "grupos terroristas" secuestraron a familias en algunos barrios de Homs, las asesinaron, y maltrataron a los cadáveres para después difundir las imágenes y utilizarlas y así lograr el apoyo internacional.
Del total de fallecidos, 70 han perecido en Homs -entre ellos los 45 hallados en Karm el Zaitun-, 25 en Idleb, cinco en Rif Damasco, cinco en Alepo y tres, respectivamente, en Damasco, Latakia y Deraa.
Otro grupo opositor, la Comisión General para la Revolución Siria, destacó en un comunicado que algunos de los cadáveres pertenecen a personas que fueron quemadas vivas, a otros se les rompió el cuello y otras partes del cuerpo, y quienes pese a todo siguieron vivos fueron degollados.
Por su parte, una fuente del Ministerio sirio de Información citada por Sana insistió en que las imágenes difundidas por algunos canales árabes de televisión por satélite son de "crímenes cometidos por grupos terroristas armados contra las familias a las que habían secuestrado y matado en Homs".
"Nos hemos acostumbrado a la escalada criminal de los grupos terroristas armados antes de las sesiones del Consejo de Seguridad (de la ONU) para pedir la injerencia extranjera en Siria", añadió la fuente, que no es identificada.
La agencia Sana cita a familias, que aseguraron a la televisión estatal siria que supuestamente identificaron entre los cadáveres a sus familiares, que habían sido secuestrados previamente por terroristas.
EFE
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