Mónica Villanueva, directora del centro antirrábico, señaló que será la Policía que determine la adopción del perro o su sacrificio.
Luego de varios días en el centro antirrábico de Lima se descartó que Manolo, el perro de raza pitbull que fue acusado de matar a su dueño, presente síntomas de rabia y agresividad, según informó Mónica Villanueva, directora de la institución a RPP Noticias.
Villanueva sostuvo que la agresividad es independiente de la raza y muestra de eso, es que los casos por mordeduras se presentan más en canes pequeños.
Agregó que, será la Policía Nacional que determine si el can será dado en adopción o sacrificado.
Asimismo, sostuvo que en tres días terminará el período de evaluación.
Comparte esta noticia