Los activistas empezaron su medida de fuerza hace más de 15 días. Le recuerdan a las autoridades que el código penal francés prohíbe cometer actos de crueldad contra un animal.
Dos franceses, integrantes de la organización en defensa de los animales Animavie, cumplen más de 15 días en huelga de hambre en protesta contra la celebración de corridas de toros en su ciudad.
El presidente de esa asociación, Christophe Leprêtre, y otra integrante, Sylvie Baudoin, de la localidad de Mimizan, en el suroeste del país, comenzaron la huelga el pasado 1 de agosto, día en que enviaron una carta al Ministerio de Interior para hacerle partícipe de su oposición y pedirle el cese de esa práctica.
El código penal, según destacaron en esa misiva recogida en la web de su agrupación, prohíbe cometer actos de crueldad contra un animal y exime de esa prohibición a las corridas siempre y cuando se pueda demostrar "una tradición local ininterrumpida".
La primera corrida en Mimizan no tuvo lugar hasta 2011 y desde entonces estos militantes no han cesado en su intento de ponerles fin, hasta llegar a la huelga de hambre, que consideran como el único medio que les queda para llamar la atención.
Leprêtre indica en la web que en estos 15 días ha perdido ya 10 kilos, pero, pese a la debilidad manifestada tras dos semanas sin comer y a la aparente falta de interés mostrada hasta la fecha por las autoridades locales, asegura que no se van a retirar.
La próxima corrida en Mimizan está programada para el 24 de agosto, y según se indica en Animavie, está previsto que otros opositores a ese espectáculo se manifiesten ese día en caso de que para entonces no se haya anulado.
EFE
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