Filipinas comenzó destruyendo cinco toneladas de colmillos de elefante para limpiar su imagen como uno de los mayores puntos del mundo para el comercio ilegal de marfil africano.
Miembros de la Oficina de Áreas Protegidas y Vida Silvestre (PAWB) de Filipinas se encargaron de la primera incineración de colmillos de elefante confiscados.
Filipinas es uno de los países con mayor comercio ilegal de marfil africano. Por tal motivo, sus autoridades han tomado drásticas medidas para limpiar dicha imagen negativa, incinerando en primera instancia un total de cinco toneladas de colmillos de elefante de procedencia ilegal.
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