El presidente de Venezuela pasó un momento vergonzoso al confundir las palabras de Jesucristo, cuando quiso evocar el pasaje bíblico que recuerda la multiplicación de los peces y los panes.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, pasó un momento vergonzoso e incómodo al confundir las palabras de Jesucristo, cuando quiso evocar el pasaje bíblico que recuerda la multiplicación de los peces y los panes.
"Hay que meterse escuela por escuela, niño por niño, liceo por liceo, comunidad por comunidad. Meternos allí, multiplicarnos, así como Cristo multiplicó los penes... perdón, los peces y los panes. ¿Me perdonan la expresión?", dijo el chavista durante un discurso pronunciado desde el Estado de Miranda.
Al considerar que salvó la situación, el mandatario insistió: “así como Cristo multiplicó los panes y los peces, hay que multiplicar el arte".
Este nuevo desliz ocurre poco tiempo después de su escandalosa confesión sobre que dormía en la tumba de Hugo Chávez o la denuncia de un supuesto plan maléfico para inocularle un veneno.
También Maduro ha acusado sin pruebas al líder opositor Henrique Capriles de liderar una "red de prostitución gay y travesti".
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