Tras 7 meses de ocurrido el cruento asesinato de la empresaria María Rosa Castillo, los dos jóvenes tendrán un careo que se realizará en el penal de Piedras Gordas de Ancón.
El joven parricida Marco Arenas, confeso asesino de su madre, la empresaria María Rosa Castillo, será confrontado a su exenamorada Fernanda Lora, en el proceso judicial que se les sigue a ambos por el sonado crimen ocurrido en noviembre del 2013.
Tras 7 meses de ocurrido el cruento asesinato, los dos jóvenes tendrán un careo que se realizará en el penal de Piedras Gordas de Ancón, en donde Arenas está recluido. En tanto que Lora será conducida a la citada prisión desde el Penal de Mujeres de Chorrillos, ex Santa Mónica, donde cumple prisión preventiva.
En la diligencia serán presentadas unas cartas que escribió Arenas y que serán usadas para inculpar a Lora como autora intelectual y cómplice del asesinato.
Según recuerda América TV, en dichas misivas la joven le habría escrito al parricida que "tu madre es una… me causa demasiado daño… en serio quiero matarla, me tiene harta de todo”.
El homicida además señala que su expareja le insistió en arrojarle petróleo al cuerpo de su madre y luego quemarlo. También le decía que no podía arrepentirse.
Comparte esta noticia