El General, Marco Miyashiro, indicó que los derechos humanos solo estuvieron orientados para defender a los terroristas.
Uno de los principales responsables que logró capturar al líder de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán, el General en retiro, Marco Miyashiro, expresó su disconformidad sobre la liberación de exterroristas, que en un momento fueron condenadas a cadena perpetua, pero que ahora salen en libertad tras cumplir una sentencia que fue reducida.
“Los tribunales sin rostro es una aberración jurídica a todas luces; sin embargo, recuérdese que cuando los policías capturaban a los terroristas y los ponía a disposición del ministerio público, estos eran soltados por falta de pruebas. Los jueces decían que estaban siendo amenazados, que ya habían muerto fiscales, pero, a pesar de ser una aberración jurídica, el gobernante que lleva la conducción política tiene que legislar para el pueblo, no para el derecho internacional”, indicó.
El ex jefe del GEIN alertó sobre el peligro que significa la liberación de estas personas, además de no entender la postura del Poder Judicial sobre la preocupación de la ciudadanía.
“Ahora estamos comentando la liberación de un elemento sumamente peligroso, asesino, violento. Pero la gente no recuerda que él fue condenado a cadena perpetua y que por ese ‘san benito’ de los derechos humanos, los juicios fueron llevados a cero, y a todos se le redujo la pena. Es una situación que muchos no entendemos ¿cómo el poder judicial puede estar tan lejano a la preocupación de la ciudadanía?, porque ellos son un peligro potencial”, enfatizó.
Por otro lado, Miyashiro se refirió a la situación que se vive en Colombia, donde las FARC y el gobierno han firmado un acuerdo de paz, “ojalá que no ocurra como en el Perú, donde los derechos humanos solo estuvieron orientados para defender a los terroristas y se juzgaron, y acusaron, a los integrantes de las fuerzas del orden”, puntualizó.
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