Hace apenas seis días el pequeño Ángel Enrique, alumbrado a los seis meses de gestación y extraído del vientre de su madre, quien se encontraba en estado de coma, había cumplido un mes.
Hace apenas seis días se celebraba el primer mes de vida del pequeño Ángel Enrique, alumbrado a los seis meses de gestación y extraído del vientre de su madre, quien se encontraba en estado de coma luego de haber sufrido un derrame cerebral. Sin embargo, falleció en la víspera producto de un proceso infeccioso que no logró superar.
El bebé, que había conseguido un kilo de peso, aunque permanecía en una incubadora, daba muchas esperanzas de que podría salir adelante. Los médicos del Hospital Loayza festejaron el viernes último el milagro de vida, pero hoy expresaron su tristeza por la partida de la criatura.
La doctora Zarela Solís, directora del nosocomio, indicó que pese a la condición estable de Ángel Enrique "en bebés prematuros cualquier evento adverso puede ocurrir".
Precisó que una falla mulsistémica, producido por un agente bacteriano conocido como cándida, se llevó al bebé, que falleció el miércoles último.
"Durante todo el mes mantuvimos mucha prudencia porque no ha sido el primer evento adverso que él ha tenido, pero ha ido saliendo de todos ellos", contó Solís a RPP Noticias.
La especialista indicó que albergaban la esperanza de que el bebé sobreviva porque el Hospital Loayza antes habían traído al mundo a un bebé de apenas 21 semanas y a la actualidad ya ha cumplido 10 años de vida. "Presumíamos que Ángel pudiera tener ese destino", comentó.
Por su parte, Susana Miranda, tía del pequeño, refirió que su familia está muy desconcertada con la noticia.
Agradeció al Hospital Loayza por las facilidades que les vienen dando con los trámites para retirar el cuerpo del menor.
"Dios quiso y mi hermana también quiso estar al lado del bebé", comentó con resignación.
Comparte esta noticia